La canción “Aquí no es así”, incluida en el álbum El nervio de un volcán de 1994, es una de las composiciones más conocidas de Caifanes, una banda que marcó un hito en la historia del rock mexicano y latinoamericano. A través de su letra, la canción aborda la confrontación entre culturas durante la conquista española y la resistencia de los pueblos originarios ante la imposición de nuevas creencias y formas de vida.
En los versos de la canción, como “Vienes caminando, ignorando sagrados ritos, pisoteando sabios templos de amor espiritual,” se retrata la llegada de los conquistadores españoles como una invasión que no solo es física, sino también espiritual y cultural. Los conquistadores, con su ambición de expansión y su imposición de la fe católica, menospreciaron las tradiciones de los pueblos indígenas, destruyendo templos y rituales ancestrales. Esta letra refleja la falta de respeto hacia las prácticas religiosas y culturales existentes.
La canción, además de retratar la historia de la conquista, tiene un fuerte mensaje de resistencia y reafirmación de identidad. El título “Aquí no es así” no solo señala una crítica a la colonización, sino que también es una expresión de rechazo hacia las imposiciones externas. Con estas palabras, Saúl Hernández, líder de Caifanes, nos habla de la necesidad de mantener la integridad cultural y el respeto por las raíces, recordando que la historia no debe repetirse ni olvidarse.
Más allá de la simple denuncia histórica, "Aquí no es así" también nos invita a reflexionar sobre la importancia de reconocer y valorar nuestras culturas prehispánicas. La canción transmite un profundo sentimiento de resistencia frente a la asimilación cultural y la homogeneización que han marcado, en muchos casos, la historia de América Latina. En este sentido, Saúl Hernández logra plasmar en la canción una crítica a la opresión colonialista y una llamada a mantener vivas las tradiciones y saberes originarios.
A lo largo de los años, “Aquí no es así” ha perdurado como un símbolo de lucha y memoria histórica. En un contexto contemporáneo, sigue siendo una pieza relevante para aquellos que buscan comprender la historia de América Latina desde una perspectiva crítica y reflexiva. A más de 30 años de su lanzamiento, la canción sigue siendo escuchada por nuevas generaciones que encuentran en ella un llamado a la preservación de la identidad cultural, el respeto por las diferencias y la importancia de reconocer nuestras raíces, que continúan siendo una fuente de resistencia.
