El gobierno de Estados Unidos ha incluido a México en su Lista de Vigilancia Prioritaria debido a la creciente preocupación por la circulación de medicamentos falsificados, algunos de los cuales contienen sustancias peligrosas como fentanilo y metanfetamina. Esta medida refleja la inquietud por la salud pública y la seguridad de los consumidores, tanto en México como en Estados Unidos.
Según datos de la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris), entre enero y agosto de 2023 se emitieron 48 alertas sanitarias relacionadas con medicamentos y material de curación falsificados o vendidos ilegalmente, triplicando las 16 alertas del mismo periodo en 2022.
La Unión Nacional de Empresarios de Farmacias (Unefarm) estima que el mercado negro de medicamentos en México podría alcanzar los 32 mil millones de pesos en 2023.
Las autoridades estadounidenses han emitido advertencias a sus ciudadanos sobre la compra de medicamentos en farmacias mexicanas, especialmente en zonas turísticas y fronterizas, donde se han detectado píldoras falsificadas que contienen fentanilo y metanfetamina.
En respuesta, la Secretaría de Salud de Michoacán ha iniciado operativos para identificar y retirar del mercado 16 marcas de medicamentos falsificados, incluyendo productos como Sedalmerck, Keytruda y Botox, entre otros.
Especialistas en salud han advertido que uno de cada diez medicamentos en México es falsificado o de baja calidad, lo que representa un riesgo significativo para la salud pública.
Para combatir esta problemática, se han implementado medidas como el uso de hologramas de seguridad en los empaques de medicamentos, que incluyen códigos QR para mejorar la trazabilidad y dificultar la falsificación.
La inclusión de México en la Lista de Vigilancia Prioritaria subraya la necesidad de fortalecer la regulación y supervisión del mercado farmacéutico, así como de fomentar la cooperación internacional para garantizar la seguridad de los medicamentos y proteger la salud de los consumidores.
