Quince años después de Tron: Legacy y más de cuatro décadas tras la película original de 1982, la aclamada saga de ciencia ficción de Disney se prepara para cerrar su historia con Tron: Ares, programada para estrenarse el próximo 10 de octubre de 2025. Dirigida por Joachim Rønning, esta tercera entrega promete una conclusión épica en un momento en que los debates sobre inteligencia artificial y tecnología digital están más presentes que nunca.
La historia se centrará en Ares (interpretado por Jared Leto), un programa de IA que logra salir del mundo digital hacia el mundo real, lo que marca el primer contacto entre humanos y entidades artificiales creadas íntegramente por computadoras. Esta premisa retoma y expande uno de los temas fundamentales de la saga: la interacción entre humanidad y tecnología, en un universo donde las líneas entre ambos mundos se desdibujan.
La película también contará con el regreso de Jeff Bridges como Kevin Flynn, el visionario creador del universo digital conocido como “La Red” (The Grid), cuyo rol ha sido clave desde la primera cinta. A su lado, un reparto renovado incluye a Greta Lee, Evan Peters, Gillian Anderson y Cameron Monaghan, que aportan nuevas perspectivas al conflicto entre algoritmos, poder y conciencia.
Tron (1982), dirigida por Steven Lisberger, fue un parteaguas visual y conceptual. La cinta introdujo al público a Kevin Flynn (Jeff Bridges), un programador que es absorbido por un mundo cibernético donde los programas tienen apariencia humana y libran batallas en arenas digitales. Su revolucionaria mezcla de animación por computadora y efectos visuales prácticos la convirtió en una obra de culto, aunque su impacto fue más apreciado con el tiempo que en su estreno.
Casi tres décadas después llegó Tron: Legacy (2010), dirigida por Joseph Kosinski. La secuela sigue a Sam Flynn (Garrett Hedlund), hijo de Kevin, quien se adentra en La Red para encontrar a su padre desaparecido. La película fue celebrada por su ambición estética, su icónica banda sonora compuesta por Daft Punk y por ampliar la mitología del universo digital. Sin embargo, pese a su propuesta visual innovadora, no logró consolidarse como un fenómeno comercial a largo plazo, aunque sí dejó una sólida base de seguidores.
Ahora, con Tron: Ares, Disney busca cerrar este ciclo con una mirada contemporánea al papel de la IA y los dilemas éticos que plantea su evolución. La incorporación de Nine Inch Nails como responsables de la banda sonora sugiere una experiencia sonora intensa, mientras que la dirección de Rønning —conocido por su trabajo en Pirates of the Caribbean: Dead Men Tell No Tales— anticipa un espectáculo visual de gran escala.
A menos de tres meses del estreno, Tron: Ares se perfila como una de las apuestas más ambiciosas del cine de ciencia ficción de 2025. Además de cerrar una saga que ha sido referente para generaciones de cinéfilos y diseñadores tecnológicos, plantea una reflexión urgente sobre los límites de lo digital, lo humano y lo que podría venir después.
