Exactamente a un mes de que se lleve a cabo la jornada electoral, o sea el día de la elección, las cosas en Cuernavaca están tomando forma las campañas, a pesar de que las encuestas les dan ventajas a algunos, esta ventaja puede ser contraproducente en los próximos días.
La ventaja de Morena con la coalición “Juntos haremos historia” no es verdadera. El candidato a la alcaldía va solo, rodeado de algunos candidatos del PES de vez en cuando, pero no de manera realmente integral, su aparato es muy grande, pero eso no significa nada, se dice que ha comprado una gran parte de la estructura a un precio exorbitante; y no lo sabemos a ciencia cierta, pero las estructuras políticas se logran a base de convencimiento, no de dinero, porque el día que le dejas de pagar a las personas que las forman se les olvida y, a la hora de votar, hacen lo que quieren, porque además son ya líderes entre comillas, que tienen más mañas que los candidatos y que se afectan y, supuestamente, apoyan a dos o tres de ellos y cobran en todos lados. Las estructuras que valieron la pena en el pasado fueron las del PRI y las del PAN, pero ahora ya todas están deshechas y los líderes que antes tenían un control ya no lo tienen, pues ahora representan a un mínimo porcentaje aunque presuman de un fuerte control. Aquí sería importante entender por quién se va a decantar la gente de todos a los que les cobran.
Morena va arriba, pero ahora con sólo dos puntos por encima del segundo lugar y tres del tercero. El segundo, que es Urióstegui, tiene el problema de no ser panista, pero lo suple con la experiencia de tanta campaña; le pegó fuerte el recibo de las tres encuestas y, al parecer, lo manejó bien pues no aclaró nada, no dejó que se perdiera y, mientras los adversarios no se lo impugnen, todo estará bien. El tercero que es el que más ha crecido, que es Matías Nazario, tiene una campaña estructurada llegando a todos los niveles, tiene experiencia política y sabe convencer cuando tiene la oportunidad de ser interlocutor; ha hecho poco ruido, pero mucho trabajo, y le está dando resultados, la prueba es que sigue sumando. Él es de los partidos nuevos locales el que en verdad tiene más posibilidades de ganar varias posiciones, pues tiene buenos candidatos en la mayoría del estado, el trabajo diario le está dando resultado y la presencia de él en un sinnúmero de lugares lo ha reforzado de manera realista.
En cuarto lugar se encuentra el ex gobernador Sergio Estrada Cajigal, que por primera vez encabeza los recorridos, antes nunca lo hizo de la manera que ahora lo hace, pero eso, desde luego, le da frutos. Tiene en su contra que el partido se señala como satélite de los aliados de Morena y, a pesar de todo lo que explican sobre que son cuernavacenses en campaña, la ciudadanía que está en contra del régimen no quiere saber nada de estos partidos que tienen buenos candidatos -algunos mejores que otros- pero el trabajo que desarrollan es interesante.
El siguiente, que sería el del PRI, tiene un candidato que recluta al gremio de los abogados de manera fuerte, pero al mismo tiempo le hace sombra que su hermano sea el abogado del actual gobierno. El partido no tiene un verdadero apoyo y la campaña se ve desdibujada. Hay muchos lugares donde no se ve realmente y necesita ponerle más recursos y mayor enjundia para lograr posicionarse; esto lo tendrán que hacer en sólo los siguientes quince días, porque el sprint final todos lo van a meter.
Los demás partidos están a un lado, la candidatura de Honorina ha despertado sobre todo en el sector empresarial mucha expectativa, lo que pasa es que se ve que no le alcanza, y eso la descalifica porque todo mundo se está planteando el voto útil.
A los demás no se les ve mucho camino y parece que las cosas se están definiendo. El PRD con Arizmendi, que por obvias razones tiene un sinnúmero de ex alumnos, sigue cargando con la nefasta figura de Graco y Gayosso, y eso lo descalifica, a pesar de que Jorge le ha puesto muchas ganas.
De la “chiquillada” no sobresale nadie más, unos mejores que otros, pero algo importante no se ve.
Estamos a un mes de la jornada electoral y la gente empieza a manifestarse, hay mucha gente que nunca ha votado y que va ir a votar; ahora también dependerá de cómo funcionen las casillas, lo que no va a ser fácil. Todas serán determinantes unas por una causa y otras por otra para la elección. ¿No cree usted?