Esta es la historia de un exbanquero que quiere convertirse en un reptil sin géneroy se hace llamar “Lady Dragón”.

Richard Hernández, exbanquero estadounidense, lleva varias cirugías para lograr su cometido; ahora se hace llamar “Lady dragón” o “Tiamat Legión Medusa”, por la diosa mesopotámica, símbolo del caos de la creación.

Antes de transitar de humano a la especie reptil, Richard Hernández trabajó en el banco JP Morgan Chase, donde llegó a ser vicepresidente y gerente de clientes en la División de Banca Corporativa, área en la que trabajaba con los 10 clientes principales de la institución.

Por muchos años, Richard Hernández mantuvo oculta su orientación sexual y su deseo de ser niña, pero con el paso del tiempo se declaró homosexual y en 1997, cuando le confirmaron que tenía VIH, decidió transformar su cuerpo en réptil, pues la noticia le pareció una sentencia de muerte.

 

 

 

En entrevista para el diario británico The Sun, Tiamat, quien actualmente tiene 58 años de edad, narró que su gusto por las serpientes nació después de que sus padres lo abandonaron, junto con sus hermanos, en un bosque al sur de Texas, donde abundan las víboras de cascabel.

Lo dejaron “como basura no deseada”, cerca de donde vivían sus abuelos maternos, quienes los recogieron.

Pero su abuelo odiaba al padre de Tianam y, por lo tanto, el niño se convirtió en víctima de abusos físicos, verbales y emocionales.

Tiamat Legión Medusa vive en Los Angeles, California, y ha gastado más de 75 mil dólares (casi 1.5 millones de pesos) para transformarse en una criatura sin género y espera que en 2025 esté totalmente convertido en un reptil.

Según The Sun, Lady dragón tiene 18 implantes de cuernossenos; se extirpó la próstata; se quitó las orejas; se dividió la lengua, similar a la de los lagartos; su nariz fue operada para que pareciera la de Lord Voldemort de Harry Potter; se quitó 36 dientes y se quedó solo con seis, que están afilados en forma de punta; y se pintó de verde la esclera de los ojos (la parte blanca).

Mi metamorfosis no está cerca. La principal de mis prioridades es despedirme del Sr. Bojangles, mi pene, lo antes posible”, comentó.

Agregó que su objetivo es terminar con el género binario:

Mi máxima preferencia es simplemente ser llamado ‘eso’, al igual que mi especie, las serpientes”.

 

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