Esta mañana, las autoridades encontraron siete cadáveres con visibles huellas de tortura en un camino de terracería que conecta los municipios de Cuernavaca y Temixco, en los límites con el Estado de México. Los cuerpos, que presuntamente presentan impactos de bala, fueron hallados en la Loma Mejía, a lo largo de la carretera Cuernavaca-Ocuilan.
La alerta sobre el macabro hallazgo fue realizada vía telefónica, lo que llevó a la intervención inmediata de la Policía. El lugar fue acordonado por las autoridades municipales y estatales, así como por efectivos de la Guardia Nacional y del Ejército Mexicano.
Personal del Servicio Médico Forense (Semefo) se desplazó al sitio para llevar a cabo el levantamiento de los cuerpos, que aún permanecen en calidad de desconocidos mientras se realizan las investigaciones pertinentes.
En un contexto relacionado, se reportó que en Cañón de Lobos, en Yautepec, también se encontró un hombre sin vida. Además, en Cuernavaca, durante la madrugada, fueron hallados dos hombres más fallecidos. Estos sucesos resaltan una creciente preocupación por la violencia en la región.