En la actualidad, teñirse el cabello se ha vuelto una práctica común entre jóvenes y adolescentes que buscan renovar su imagen, expresar su estilo personal o simplemente experimentar con su apariencia. Sin embargo, este proceso, que implica el uso de químicos, también genera preocupación por los posibles daños que puede causar al cabello si no se tienen los cuidados adecuados.
El miedo a arruinar el cabello es completamente válido, ya que la decoloración y la aplicación de tintes pueden resecar, debilitar o romper la fibra capilar. Por ello, expertos en cuidado capilar recomiendan seguir una serie de prácticas para minimizar el daño y mantener el cabello saludable y con buen aspecto tras el cambio de look.
- Lava con agua fría o tibia, nunca con agua caliente: El agua caliente abre la cutícula del cabello y contribuye a la pérdida del color. Usar agua fría o tibia al lavar el cabello ayuda a preservar la intensidad del tinte y a evitar el resecamiento.
- Usa una rutina adecuada para tu cabello: Es fundamental adoptar una rutina de cuidado capilar diseñada específicamente para cabello teñido. Esta debe incluir un pre-shampoo, un shampoo adecuado para tu tipo de cabello o, de preferencia, sin sulfatos (que limpia sin agredir), mascarillas nutritivas al menos una vez por semana, y un protector contra rayos UV, ya que el sol también puede deteriorar el color.
- Evita salir a nadar: Tanto el cloro de las albercas como la sal del mar pueden afectar la duración del tinte y maltratar aún más el cabello procesado. Si decides nadar, lo ideal es usar gorros especiales o aplicar productos protectores.
- Consulta con un profesional, si puedes: Aunque existen opciones para teñirse en casa, lo más recomendable es acudir con un especialista, especialmente si se trata de cambios drásticos o procesos como la decoloración. Un profesional sabrá qué productos usar y cómo proteger tu cabello.
Cuidar tu cabello antes, durante y después de teñirlo no solo mejora los resultados, sino que también prolonga la duración del color y mantiene la salud capilar a largo plazo.