-Oye, jefe, ¿ya te enteraste del desmadrito que se armó con la entrevista al candidato? ¿Te pasaron el reporte de que llegó tardísimo?

- Algo me comentó la recepcionista y también Carlos el camarógrafo, pero a él lo vi muy nervioso y sólo me recomendó que mejor lo platicara con el reportero, lo malo es que él salió de urgencia y me dejó el recado de que me va a llamar por teléfono en la noche. ¿Pero qué pasó, Javier?, ¿se puso pesado el candidato?

- No, qué va, mi Lalo, al contrario, se la pasó echando desmadre y creo que venía bien pasado de cubas o hasta de otras cosas más feas.

- No inventes, Javier, eso no se dice así a la ligera, si alguien te escucha me vas a meter en un problema y se va a cuestionar mi autoridad como jefe de información. ¿Cómo quedo yo? Va a decir el director que mi equipo es poco profesional y no fue capaz de cuidar al candidato.

- Tienes razón, Lalo, discúlpame, sé que no debo andar de bocón pues tú eres el mero mero acá, pero la verdad sí sería bueno que hables con los editores para que te expliquen el relajito. Yo nada más apoyé con la iluminación y no estuve tan cerca del candidato pero sí lo vi raro y muy fanfarrón. Como que quería impresionar a la dama que lo acompañó.

- ¿Cómo?, ¿No se supone que él iba a venir con la familia para la sesión de fotos y la entrevista?

- Pues no, jefazo. Vino con una jovencita muy chula que imagino es su novia o algo así y los dos traían un desmadre, la verdad. Se ve que venían de una fiesta porque estaban muy elegantes aunque el candidato traía la camisa toda manchada de salsa. Le dijo a la recepcionista que antes de venir a la redacción habían pasado a comer y se dieron un atracón de langostinos enchipotlados que les dejaron la ropa toda salpicada. Suerte que traía una muda extra que iba a usar en la sesión de fotos.

- Ese Alejandro no cambia. Está viendo que los otros candidatos lo molestan con lo de sus adicciones, las juergas y sus infidelidades y sale con esto. Mira que es mi cuate, pero está bien mal si piensa que le voy a pasar sus numeritos. Nuestro prestigio como medio vale más que su diputación.

- No te enojes, jefe, yo nomás lo comento porque me pareció muy hablador y confianzudo el tipo, por eso pienso que a lo mejor estaba tomado, pero ya ves que yo entiendo poco la personalidad de estos personajes. Tú eres es una persona muy curtida en esto y seguro sabrás evaluar mejor la situación cuando hables con el reportero.

- Lo malo es que el Rafa se fue y quién sabe a qué horas se vaya a reportar y hay poco tiempo pues tengo que revisar los videos y programar las publicaciones en la edición impresa. Ya me picaste la curiosidad. Aparte del desmadre que traía, y lo de la novia ¿hizo alguna otra tontería Alejandro?, ¿cómo se desenvolvió en la entrevista?, ¿lo molestó mucho el Rafa con las preguntas?

- Ay, jefe, no, ya me pusiste a parir chayotes. Ya sabes que yo no entiendo mucho de periodismo, mejor pregúntale al equipo editorial o al camarógrafo.

- Carlos me dijo que hablara con Rafa pero él no está ni me contesta el teléfono, así que para que se te quite la maña de andar de madreardiendo me vas a decir lo que te llamó la atención de la entrevista. Ya me preocupaste, Javier.

- Mira, jefazo, yo entiendo que la regué por hocicón, pero no te voy a mentir, eres muy derecho y mereces todo mi respeto. Pienso que el candidato estaba bien cruzado pues como que no entendía las preguntas y respondía puras incoherencias, le daba muchas vueltas a todo y alardeaba de que él es el bueno y que ya tienen planchado todo para que él gane la elección; se burló de los otros candidatos y dijo que son puros maletas que se vendieron muy barato y que no entienden nada de política y poder. Qué es una jalada creer que la política es para servir siendo honesto, que en México lo que vale es apañar todo lo que se pueda porque si no alguien más lo va a hacer...

- ¿En serio? ¡No me digas, Javier! ¿Y Rafa no lo corregía o le pedía que se ciñera al tema de la pregunta y al guión de la entrevista?

- Qué va, jefazo, el Rafa se veía muy sorprendido, como todos en el set, pero también se notaba contento. No sé, a lo mejor le gustó escuchar tan franca confesión y dejó hablar al candidato. Incluso le ayudó a recordar el nombre del autor de una frase sobre ser político y ser pobre ....

- Un político pobre es un pobre político.

- ¡Ándale, mi Lalo, esa frase! El candidato olvidó el nombre del autor, o hizo como que no lo recordaba, y Rafa le ayudó: Carlos Hank González, le dijo. -¡Ese mero cabrón, ese mero... ¡el papá de todos!-, le contestó el candidato. - Pinche Javier, y eso que nadamás estabas apoyando con la iluminación. Te aconsejo que no andes contando lo que pasó con Alejandro, ese tipo es malandro y si se entera que nosotros cometimos alguna indiscreción con su entrevista me vas a meter en un broncón y tú te vas a exponer muy feo. La gente como él es violenta y no se anda por las ramas.

- No me asustes, jefe. Por mi parte te prometo que todo queda entre nos, pero habla con el equipo no la vayan a regar y provoquen un problema grande.

- Claro, luego voy a hablar con todos, pero la bronca ahorita es qué chingao le voy a decir al director pues me encargó mucho la entrevista. ¿Crees que se pueda salvar o de plano habrá que repetirla?

- Para mí que no sirve pero mejor échale un ojo tú. Las respuestas son incongruentes y en algunos casos ininteligibles. Al tipo le daban episodios de risa y quién sabe cuántas cosas mascullaba, pero casi nadie en el set le entendió. Sólo su novia parecía comprender las incoherencias del candidato.

Ora sí que lo más claro fueron sus fanfarronadas. Dijo que su primer negocio como diputado va a ser ensartarle a los trabajadores de la educación un seguro contra incendios. Según él ya tiene el tamal hecho con una aseguradora de esas que se tiran a matar y bajita la tenaza le van a tocar a él 20 millones de pesos cada bimestre por este ‘negocio’. El Rafa le preguntó que cual sería la prima de indemnización para cada asegurado y él, muerto de risa, le dijo que un millón de pesos pero que la aseguradora nunca va a pagar nada porque las polizas no tienen valor legal y además las van a hacer perdedizas.

- Ah, cómo será burro el Alejandro, esas cosas no se dicen. En qué problema me metió; voy a cancelar la publicación y repetir la entrevista. A ver si nos da tiempo porque ya casi acaban las campañas y todavía falta que acepte venir otra vez.

- Si viene igual de desmadroso va a servir de poco, mi jefe.

- Sí, ya sé. Voy a tener que hablar con él y también plantearle el asunto al director, a ver cómo me va. Porfa, por lo pronto ve con los editores y diles que no trabajen el material de la grabación, que lo respalden en un disco duro externo y lo borren de los servidores. Que sólo me deben entregar a mí el disco, a nadie más; no les des más explicaciones. También háblales a Carlos y Rafa, a ver si a ti te contestan, y diles que me urge hablar con ellos, por favor, Javier.

- Mira, jefe, no te quería decir pero ya que se puso denso esto, te comento que Rafa se fue con el candidato en su coche y creo que agarró la jarra con él.

- ¿Cómo?, ¡Pinche Rafa ya ni la chinga, me cae!

- Pero eso no es lo peor, jefe... - ¡Ay, Javier, no me digas que Carlos también está con ellos!

- No. Él me acaba de escribir por Whats, dice que está en la central camionera para intentar tomar un autobús que lo saque de la ciudad lo más pronto posible. Según dice que una hora después de grabar la entrevista recibió una llamada de un número raro y un tipo lo amenazó de muerte y le dijo que tienen identificada a su familia y saben dónde vive. Antes de colgar le advirtió: ‘Trata bien al jefe, no te pases de pendejo o voy por ti’.

Carlos dice que te va a escribir pero que por lo pronto te avise de su renuncia y que lo disculpes pero su seguridad y familia son primero.

Chef de caldos

Estrena Martín Moreno Arrebatos Culinarios le sale lo estrafalario y recomienda venenos; si fuera chile relleno el consejo se razona, pero ni un chile le embona al pinche e historiador... él ama el conservador de un caldo que no sazona. Para probar eso amargo que nos recuerda el PriPán que pida en el restorán un nuevo y mejor encargo: El pan de sal pa’l embargo por tanta devaluación, moronga de exportación por las crisis recurrentes, y una sopa pestilente para honrar a Calderón.

Un pozole de estudiante o picadillo de Acteal, algún sabroso tamal en burla de los votantes; atoles como purgantes o tacos de lengua larga, y chile pa’quien encarga un caldo todo seboso... México come sabroso ¿quién pide una sopa amarga? Que promueva la cocina que en Tijuana se celebra en la salsa de Culebra que inventó Carlos Salinas; o el espurio de cantina con su envueltos de fosa y la receta famosa de una fatal barbacoa... le llamaron Fobaproa es muy cara y asquerosa. Antes que todo se rompa y pa’que dejen propina promuevan la gelatina que fácilmente se compra; ¿qué tal un mole de trompa para acabar la semana?... o el señor don culinario sólo sirve de botana. martín moreno se pierde con arrebatos de experto disfruta del pan de muerto horneado con leña verde.

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