La gobernadora Margarita González Saravia, confirmó que el cierre de la planta Nissan en el estado afectará directamente a dos mil 400 trabajadores y calificó la decisión como un hecho “consternador”, aunque precisó que responde a una reestructuración internacional de la compañía automotriz.
“Nos preocupa la situación de los trabajadores. Es un tema que no nos gusta, pero es una decisión corporativa internacional”, señaló la mandataria al subrayar que el movimiento forma parte de una estrategia global de Nissan que incluye el cierre y concentración de operaciones en distintos países y estados de la República, privilegiando a Aguascalientes como centro de producción en México.
González Saravia informó que sostendrá una reunión con representantes de Nissan en México para conocer los pormenores del cierre y los mecanismos de apoyo que ofrecerá la empresa a sus empleados, entre ellos la posibilidad de trasladar personal a otras plantas.
Paralelamente, el gobierno estatal activará un plan de respuesta que contempla la recolocación laboral mediante el Servicio Nacional del Empleo en empresas del sector automotriz instaladas en Morelos; programas de emprendimiento especializados, dirigidos a trabajadores que deseen iniciar negocios propios aprovechando sus habilidades técnicas; así como vinculación con armadoras y proveedores ya establecidos en el estado para aprovechar la mano de obra calificada.
“Vamos a apoyar en todo lo que esté en nuestras manos. Hay siete armadoras operando en Morelos y cinco parques industriales; incluso analizamos adquirir más hectáreas para atraer nuevas inversiones con incentivos fiscales y facilidades en terrenos”, explicó la gobernadora.
La mandataria confirmó que mantiene comunicación directa con el secretario de Economía Marcelo Ebrard y el secretario del Trabajo federal, Marath Baruch Bolaños, para que Morelos sea considerado en los planes de relocalización de empresas automotrices. También solicitó respaldo para gestionar la llegada de nuevas inversiones que compensen el impacto económico y laboral del cierre.
“Queremos que Morelos sea una opción estratégica para empresas que busquen instalarse en el país; no solo para atender a los trabajadores de Nissan, sino para generar más empleo en el estado”, señaló.
El cierre de la planta representa un golpe para el sector automotriz en Morelos, que en la última década ha sido uno de los principales generadores de empleo formal. Nissan llegó a la entidad en 1962 y su operación en la región se convirtió en un polo de atracción para proveedores y armadoras.
Actualmente, el sindicato de trabajadores mantiene asambleas internas para definir su postura y preparar negociaciones con la empresa. El gobierno estatal reiteró su disposición a acompañar este proceso y establecer un contrato especial de apoyo durante la transición.
“Que sepan los trabajadores que no están solos; el gobierno de Morelos va a respaldarlos en este proceso tan difícil”, finalizó González Saravia.

Marcela García / marcela.garcia@diariodemorelos.com
 

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