Los murales de los artistas Eduardo Solares y Salvador Tarazona, ubicados en el Museo Regional de los Pueblos de Morelos (Murepumo), serán sometidos a una segunda intervención para reparar los daños causados por una onda tropical en julio de 2023. Estas obras, pintadas en la década de 1930, fueron descubiertas durante las remodelaciones del museo entre 2018 y 2022, tras permanecer ocultas por un plafón por al menos 50 años.
La restauración, a cargo Denise Charua Ayala y Federico Cambieri, inició el 4 de agosto y se extenderá hasta el 31 de octubre. Se busca corregir las afectaciones provocadas por las filtraciones de agua, que causaron manchas de humedad, florescencia salina y desprendimiento de la capa pictórica y los enlucidos.
Una característica destacada de esta restauración es que se realizará a la vista del público. Rodolfo Candelas Castañeda, director del Murepumo, explicó que la sala donde se encuentran los murales permanecerá abierta para que los visitantes puedan observar el proceso de conservación. Se colocarán cédulas informativas para educar al público sobre la importancia de proteger el patrimonio cultural.
LOS MURALES
Primer mural (1938): En la segunda sección de la sala, es obra de Salvador Tarazona y representa el árbol de Tamoanchan. Simboliza el “hogar primordial de dioses y seres humanos”.
Segundo mural (1932): De Eduardo Solares, se localiza en la tercera sección. Se aprecian vestigios de esta obra, que incluye figuras de atlantes y mujeres con llamas en las manos.
Tercer mural (1938): Pintado sobre la obra de Solares, también de Tarazona. Muestra elementos ornamentales prehispánicos sobre fondo verde.
La restauradora Estíbaliz Guzmán subraya el valor de estas pinturas, ya que “sirven como una ventana histórica del edificio” y revelan las diferentes etapas decorativas.
