Siempre. Especialistas señalan que es importante actividad física, además de socializar y convivir con otras mascotas.
La agresividad de una mascota es un tema serio que se debe de resolver, pues de otra forma pone en peligro al entorno; tanto a personas como a otras mascotas.
Un perro puede ser agresivo por muchas razones, regularmente es porque considera que debe de proteger algo o alguien importante para él, porque se considera en riesgo físico, porque se siente amenazado o porque su instinto predatorio ha salido a relucir.
También depende del ambiente en el que el perro se desenvuelva, o si el perro se siente en una situación de estrés o con dolor de cualquier tipo, o incluso si siente que su territorio ha sido invadido.
¿QUÉ HAGO SI MI PERRO ES AGRESIVO?
Lo mejor será una revisión de tu veterinario, este descartará que la agresividad no se deba a alguna enfermedad o incluso si se debe a una causa genética.
Si tu mascota no presenta ninguna enfermedad ni causa genética, su agresividad puede deberse a energía almacenada que no libera, por lo que es importante la actividad física, además de el hecho de socializar y acostumbrarse a convivir con otras mascotas, esto, además de ayudarle con su comportamiento, le dará de horas muy divertidas de juego.
¿CUÁNTA ACTIVIDAD?
Los perros necesitan ejercicio diario para mantener un peso saludable y mantener su cuerpo en movimiento para evitar que desarrollen sobrepeso/ obesidad o bien para que no se sientan nerviosos o ansiosos y destruyan los muebles, zapatos y ropa en el hogar.
Primero se debe de considerar la raza para saber un poquito del temperamento que tienen por raza.
El Schnauzer: les gusta disfrutan de un paseo, de juegos o caminatas de 20 a 30 minutos al día (algunos hasta por más tiempo).
El Pastor Alemán, el Belga Malinois o el Jack Rusel Terrier son razas muy activas y necesitan de 1 a 3 horas diarias de ejercicio para mantenerse tranquilos dentro del hogar.
Por eso antes de adquirir un perro de raza debemos informarnos con el veterinario si es la mejor opción para el estilo de vida que tenemos.
Sin embargo, cualquier forma de agresividad en perros puede suponer un grave problema de seguridad tanto para las personas como para otros perros, además de dificultar la convivencia.
Por eso, si tu perro es agresivo, no dudes en consultar con un especialista veterinario.
Si es agresivo con las personas cuando está afuera, o con otros perros que caminan, mantenlo siempre con la correa y considera entrenarlo para que esto no suceda o incluso es posible que sea necesario que use un bozal cuando esté al aire libre o en público.
Fuente: Virbac.