Tener un cuerpo sano está bien, pero si quieres llegar lejos —en edad y calidad de vida— también necesitas cuidar tu cerebro. La neurociencia ha demostrado que, aunque el deterioro cognitivo es parte natural del envejecimiento, hay maneras de mantener nuestras capacidades mentales en buena forma durante más tiempo.
Un cerebro sano significa mejor memoria, concentración, pensamiento crítico y una mayor capacidad para adaptarte a los cambios de la vida. Y no, no necesitas invertir una fortuna ni complicarte: se trata de hábitos simples que puedes incorporar desde hoy.
¿Cómo envejece el cerebro?
Con los años, el cerebro también cambia. Algunas funciones se ralentizan, otras se vuelven menos eficientes. Pero eso no significa que no puedas hacer nada al respecto. Al contrario: ciertos hábitos pueden ayudarte a mantener tu mente clara y activa, y reducir el riesgo de problemas como la demencia o el Alzheimer.
Estrategias para cuidar tu cerebro, según la neurociencia
El profesor Stan A. Goldberg, de la Universidad Estatal de San Francisco, propone tres estrategias clave para proteger la salud mental a medida que envejecemos:
1. Desacelera
Evita responder en automático todo el tiempo. Tómate un segundo antes de actuar o reaccionar. Este tipo de pausa ayuda a que tu cerebro se sincronice mejor con tu entorno y se mantenga más atento.
2. Apóyate en lo visual
Los recordatorios visuales —como notas, dibujos o símbolos— refuerzan la memoria y el aprendizaje. Usar imágenes claras y duraderas ayuda al cerebro a retener la información con mayor facilidad.
3. Haz pausas
Así como tu cuerpo necesita descanso, tu cerebro también. Toma un break cada 30 minutos, cambia de actividad o haz unos minutos de meditación. Eso ayuda a reducir la fatiga mental y mejora la concentración.
Lo que deberías evitar
Además de incorporar buenos hábitos, también es importante dejar de lado algunos comportamientos dañinos. El Dr. Baibing Chen, experto en neurociencia, señala tres costumbres comunes que aceleran el deterioro cognitivo:
- Refrescos todos los días
El exceso de azúcar afecta al cerebro, promueve la inflamación y puede aumentar el riesgo de enfermedades neurodegenerativas.
- Música a todo volumen
Escuchar sonidos muy altos daña tu audición, y la pérdida auditiva ha sido asociada con más casos de ansiedad, depresión y deterioro cognitivo.
- Dormir poco
El descanso es esencial. Dormir mal afecta tu capacidad para pensar con claridad y resolver problemas, pero la buena noticia es que gran parte del daño puede revertirse con una mejor higiene del sueño.
Cuidar tu cerebro es una inversión diaria. Entre más pronto empieces, más tiempo podrás disfrutar de una mente ágil y fuerte.

