El gigante tecnológico Google se encuentra en el centro de un histórico juicio antimonopolio que ha sido iniciado por el Departamento de Justicia de EE. UU. y un grupo de fiscales generales estatales. Este caso marca la primera vez en más de dos décadas que el Gobierno de EE. UU. lleva a cabo una demanda por monopolio contra una empresa tecnológica de gran envergadura.

Las acusaciones contra Google

El Departamento de Justicia y sus aliados alegan que Google ha utilizado prácticas desleales para mantener su dominio en el mercado, incluyendo la firma de contratos exclusivos con socios comerciales, como Apple y Samsung. Uno de los puntos clave de la acusación es el pago millonario que Google habría hecho a Apple para asegurarse de que su motor de búsqueda fuera el predeterminado en los dispositivos iPhone.

Según la denuncia presentada por el Departamento de Justicia, "Google paga miles de millones de dólares cada año a distribuidores, incluidos fabricantes de dispositivos populares como Apple, LG, Motorola y Samsung, para asegurar el estado predeterminado de su motor de búsqueda general". Esta acción se considera una forma de soborno.

 

El juicio y sus protagonistas

Se espera que el juicio dure aproximadamente 10 semanas y contará con testimonios de altos ejecutivos de Google y su empresa matriz, Alphabet. Entre los testigos más destacados se encuentra Sundar Pichai, CEO de Alphabet, y posiblemente Eddy Cue, uno de los líderes más influyentes de Apple.

Google defiende sus acuerdos con socios argumentando que no impiden que la competencia desarrolle sus propios motores de búsqueda ni limitan a Apple u otros a promocionar otras opciones. Afirma que se trata de una competencia legítima y no de una exclusión ilegal.

 

Las implicaciones para la competencia y los rivales

El progreso del juicio ha sido recibido con entusiasmo por algunos competidores, como DuckDuckGo, que afirma que Google dificulta la posibilidad de establecer su motor de búsqueda como predeterminado en dispositivos. Según DuckDuckGo, reemplazar a Google como motor de búsqueda predeterminado en dispositivos Android implica una serie de pasos engorrosos. El Departamento de Justicia sostiene que las tácticas de Google obstaculizan la capacidad de los usuarios para encontrar resultados de búsqueda más relevantes y afectan negativamente a la competencia, limitando el desarrollo de mejores opciones para los consumidores.

 

El impacto potencial y el veredicto futuro

Si Google es declarado culpable, las consecuencias podrían ser significativas. Las acciones legales podrían obligar a Google a dejar de pagar a Apple y otras empresas para que conviertan a Google en el motor de búsqueda predeterminado en dispositivos. Las sanciones financieras son una posibilidad, pero el enfoque principal del Departamento de Justicia es poner fin a las prácticas desleales de Google.

El veredicto final, que se espera para 2024, será crucial en un momento en que la inteligencia artificial está en auge. Determinará si Google puede utilizar su producto principal para dominar nuevos negocios en los próximos años. El juicio también coincide con el 25 aniversario de Google y afectará a una empresa matriz, Alphabet, valorada en 1,7 billones de dólares, cuyos ingresos provienen en gran parte de la venta de publicidad, generada por miles de millones de búsquedas diarias.

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