Jacobo Grinberg, el reconocido psicólogo y neurofisiólogo mexicano, dedicó una gran parte de su vida al estudio de la conciencia y los fenómenos chamánicos en México. Entre los personajes más destacados de su investigación se encuentra Don Lucio, el cual destaca como uno de los más enigmáticos y místicos. Este chamán, cuya existencia ha sido envuelta entre testimonios sorprendentes, representaba para Grinberg un puente entre la ciencia y la espiritualidad.
¿Quién fue Don Lucio?
Don Lucio fue un chamán originario del estado de Morelos. Pertenecía al linaje de los graniceros, también conocidos como tiemperos o aguadores, quienes se dedican al manejo de las condiciones atmosféricas para proteger las cosechas de las comunidades locales. Básicamente, su labor consistía en prevenir tormentas, granizadas y heladas que pudieran dañar los sembradíos.
Según las tradiciones de su linaje, los graniceros son seleccionados por los “trabajadores del tiempo”, seres del mundo invisible que habitan en el espacio. Esta elección impacta al candidato en forma de rayo, quien sobrevive y adquiere las habilidades chamánicas. Don Lucio experimentó este evento hace más de treinta años, lo que le marcó el inicio de su camino como chamán.
Además de su labor como curandero y protector del clima, Don Lucio era maestro y guía de un grupo de discípulos. Anualmente, el 5 de mayo, lideraba una ceremonia en “El Caleca”, una cueva situada entre el Popocatépetl e Iztaccíhuatl, donde solicitaba poder para enfrentar las inclemencias del clima.
En su vida cotidiana, Don Lucio se desempeñaba como campesino, cuidando su milpa, animales y hogar. Mantenía un equilibrio entre sus responsabilidades familiares y su profesión chamánica, donde, en su hogar, se encargaba de realizar sus curaciones y enseñanzas espirituales.
El Encuentro con Jacobo Grinberg
Grinberg documentó su experiencia con Don Lucio en sus estudios sobre el chamanismo, un tema que lo llevó a explorar la relación entre la conciencia y lo que conocemos como realidad. Fascinado por las capacidades del chamán, Grinberg intentó aplicar un enfoque experimental para entender sus técnicas y su posible conexión con el “campo neuronal”, una teoría que propondría la existencia de una red de información compartida por todas las mentes.
Aunque nunca se lograron pruebas concluyentes sobre las habilidades de Don Lucio, los relatos de Grinberg lo describen como un hombre con un profundo conocimiento de la mente humana y la naturaleza.
El Misterio que Perdura
Hoy en día, Don Lucio sigue siendo una figura envuelta en el misterio. Su historia, al igual que muchas de las investigaciones de Grinberg, se ha convertido en parte de la cultura esotérica de México.
Lo cierto es que, gracias a Jacobo Grinberg, la historia de Don Lucio sigue viva, recordándonos que hay aspectos de la mente humana y la realidad que aún escapan a nuestra comprensión.