En un fenómeno que parece sacado de una película de ciencia ficción, pero respaldado por evidencia científica sólida, la Península de Baja California se está alejando lentamente del resto de México. Este proceso geológico, impulsado por el movimiento de las placas tectónicas, podría convertirla en una isla en un futuro lejano. La Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) ha confirmado recientemente que la península se desplaza a un ritmo de entre 4 y 5 centímetros por año, un movimiento que ha acumulado 24 metros en los últimos 500 años, desde la llegada de los españoles. 

El origen tectónico: Un divorcio continental de millones de años

La separación de Baja California no es un evento repentino, sino el resultado de un proceso que comenzó hace aproximadamente 12 a 15 millones de años, durante el Mioceno. La península forma parte de la Placa del Pacífico, que se mueve hacia el noroeste respecto a la Placa Norteamericana, donde se encuentra el resto de México continental. 

Esta interacción ha dado lugar al Golfo de California, también conocido como Mar de Cortés, que actúa como una zona de rift o extensión donde la corteza terrestre se estira y adelgaza.El límite entre estas placas es visible en la Falla de San Andrés, que se extiende desde el Golfo de California hasta el norte de California, en Estados Unidos. En el sur, la falla se ramifica en un sistema de grietas que separan la península del continente. 

Este movimiento no sólo ha formado el golfo, sino que ha generado una cadena de volcanes inactivos en la región, como Las Tres Vírgenes, que erupcionó por última vez en 1746. 

Además, explica la alta sismicidad en Baja California, con terremotos frecuentes que recuerdan la vulnerabilidad tectónica del área.

Datos interesantes sobre la geología: Longitud y forma

La península mide unos 1,220 km de largo y entre 40 y 240 km de ancho, con una superficie de 143,396 km². 

Montañas y desiertos: Incluye sierras como la de Juárez y San Pedro Mártir, con picos que superan los 3,000 metros, como el Picacho del Diablo (3,095 m). 

 Al este, domina el Desierto de Sonora, mientras que al oeste hay llanuras costeras.

Islas asociadas: La península cuenta con islas como Guadalupe (el punto más occidental de México) y Ángel de la Guarda, separada por el Canal de Ballenas. 

Velocidad y proyecciones: ¿Cuándo se convertirá en isla?

Según mediciones de GPS y estudios geofísicos, la península se aleja a una tasa promedio de 2 a 5 cm por año, aunque algunas fuentes precisan 4-6 cm en la zona sur del Golfo de California. 

Para contextualizar: en los últimos 5 millones de años, ha recorrido unos 300 km hacia el noroeste. 

Tasa de separación 2-5 cm/año (promedio); hasta 4.7 cm/año en el sur del Golfo. 

Distancia acumulada ~250 km desde el inicio del rift; 24 m en 500 años. 

Tiempo para isla completa 20-30 millones de años, formando un mar interior o isla. 

Impacto sísmico Alta actividad; extensión y fallas de deslizamiento lateral. 

Expertos como los del Instituto de Geofísica de la UNAM y el San Diego Natural History Museum coinciden en que este proceso es parte de la evolución natural de la Tierra, similar a cómo se formaron otros océanos en el pasado. 

En redes sociales como X (antes Twitter), usuarios han compartido mapas hipotéticos de un México futuro sin la península unida, generando debates virales. 

En Instagram y Facebook, publicaciones recientes destacan visuales de la falla y proyecciones, con miles de interacciones. 

Impactos y curiosidades: Más allá de la geología

Este movimiento no sólo cambiará el mapa de México, sino que ha influido en la biodiversidad y la historia humana. El Golfo de California es uno de los mares más productivos del mundo, con especies endémicas como ballenas y tortugas marinas. 

Pinturas rupestres de hasta 40,000 años en islas como Espíritu Santo evidencian ocupación humana temprana. 

Económicamente, Baja California (dividida en los estados de Baja California y Baja California Sur) es próspera: con una población de unos 3.8 millones en el norte y 800,000 en el sur, destaca en turismo, agricultura (como el Valle de Guadalupe, famoso por vinos) y maquiladoras. 

Sin embargo, la actividad tectónica implica riesgos: terremotos y posibles tsunamis, aunque no hay alertas inmediatas.

Curiosidades históricas

En el siglo XIX, EE.UU. consideró anexar Baja California durante la Guerra México-Estados Unidos, pero el Tratado de Guadalupe Hidalgo la mantuvo mexicana. 

Filibusteros como William Walker intentaron conquistarla en 1853, proclamándola república independiente, pero fallaron. 

Astronautas como Thomas Pesquet han capturado imágenes impresionantes de la península desde el espacio, destacando su forma alargada. 

Un futuro lejano, pero fascinante

Aunque la separación total tardará millones de años —tiempo suficiente para que generaciones enteras no lo noten—, este proceso subraya la dinámica constante de nuestro planeta. No hay razón para alarmarse: es un recordatorio de que la Tierra está viva y en cambio perpetuo. Mientras tanto, Baja California sigue siendo un tesoro mexicano, con sus playas, desiertos y vinos invitando a explorarla antes de que, algún día remoto, navegue sola por el Pacífico. 

Para más detalles, consulta fuentes como la UNAM o el USGS, y sigue el debate en redes donde este tema ha generado miles de vistas y comentarios. 

 

Cumple los criterios de The Trust Project

Saber más

Síguenos en Google Noticias para mantenerte siempre informado

Sigue el canal de Diario De Morelos en WhatsApp