Cada uno de ustedes amables lectores, a estas alturas de casi 60 días del nuevo sexenio gubernamental, tal vez ya tenga su primera respuesta que quizá cambie con el paso de los meses por lo que corresponde al actual periodo de quien gobierna, quien manda y quien ordena… Según nuestra observación y análisis, sin lugar a dudas que la que gobierna es la PresidentA de la República, Claudia
Sheinbaum Pardo, quien representa las instituciones nacionales de este país, pues por razón de ser la PresidentA Constitucional tras la elección de que fue objeto el pasado 2 de junio; democráticamente ganó para ser la gobernante de la nación y por lo tanto de motu propio, asistida, asesorada o aconsejada casi ya dejó y tiene decidida la estructura gubernamental con la cual transitará en el curso de su Gobierno… Ya tiene bajo su férula real o presuntamente, a sus áreas de secretarías para tratar de garantizar la seguridad pública nacional entre el Ejército, la Marina, la Guardia Nacional y la supersecretaría de Seguridad Pública nacional, a la cual se pueden sumar la Fiscalía General de la República y tal vez la Secretaría de Gobernación… En el área Económica tiene las secretarías y dependencias que encabeza la Secretaría de Hacienda y la Secretaría de Economía… En el área energética cuenta con la Secretaría del ramo, Petróleos Mexicanos y la Comisión Federal de Electricidad, con otras de ese sector… Para las otras áreas relevantes ahí están las secretarías de Educación, Salud, Agricultura, del Trabajo y otras más, cuyos encargados, esperamos, sean su gente… En las gubernaturas del país, sólo ella, pero más su antecesor, saben quiénes son los gobiernos no sólo afines a Morena sino POSIBLEMENTE LEALES a la Presidencia de la República, más que a quien los dejó en esas gubernaturas estatales por vías de la democracia, la trampa o la imposición… En el Poder Legislativo, los cuestionamientos son muy sencillos: ¿Cuántos de los 257 diputados de Morena palomeó
Claudia para estructurar la Cámara de Diputados…? ¿Son suyos o los palomeó el Peje…? La misma pregunta es por cuánto a los Senadores de la República, ¿Cuántos son suyos por haberlos palomeado como es el caso de
Omar García Harfuch y cuántos fueron palomeados, decididos y ordenados por su antecesor…? Queda claro que los casos singulares de
Ricardo Monreal, quien pretende ser autónomo; el sumiso y hasta abyecto Adán Augusto López Hernández e indudablemente el cuasi liberto Gerardo Fernández
Noroña, se la deben más al que se fue que a la PresidentA, pues son hábiles para tratar de simular lealtades e institucionalidad que quedan muy lejos de sus posibilidades por las órdenes que deben cumplir, ¿de parte de quién, de Claudia o de Andrés, de Andrés o de Claudia…?
Basta con una sola referencia para que cada quien haga su ecuación y saque su resultado por el vergonzoso caso de Rosario Piedra Ibarra, quien pese a todas sus ignorancias, desvergüenzas y menosprecios, incluso de muchos legisladores morenistas, estos bajo el bastón de sus pastores Ricardo, Augusto y Noroña fueron los cuidanderos para que no sólo los morenos, los verdes, los del
Trabajo y otros micropartidos se sumaran dócilmente para levantar el dedo por esta aberración que tuvo su inicio hace 5 años cuando Rosario fue impuesta por el dueño de la
4T que parece sigue siendo lo mismo, lo cual deja en evidencia la declaración primaria de la PresidentA cuando expresó: “El Senado la eligió y ya”, para luego tener que corregir y ampliar sus conceptos de alabanzas por Piedra Ibarra como lo hiciera en su tiempo en distintos momentos de ensalzamiento López Obrador para tratar de justificar esa decisión y orden que les mandó a sus legisladores en turno; en ambas etapas por lo de la Comisión Nacional de Derechos Humanos, la oposición rechazó esa aberración pero se impuso el autoritarismo… ¿Cuánto de verdad está de acuerdo Claudia Sheinbaum Pardo tras la imposición de Rosario Piedra en los Derechos Humanos para su etapa de Gobierno…? Se puede advertir, según sus propias declaraciones y gesticulaciones, que casi nada… En conclusión, consideramos que ella gobierna, que los legisladores cumplen con su función, pero quien ordena y manda no está en Palenque como dice Claudia, sino en el click cibernético para disponer lo que se le antoje y ocurra… Que conste, casi a diario López
Obrador está en boca de la PresidentA…! ¿Hasta cuándo…? ¡Ahí la dejamos! ¡Hasta mañana que será un día más!