Graciela Ramírez Ruiz, madre de un joven de 18 años con discapacidad intelectual, denunció que las autoridades de educación discriminan a su hijo e incurren en una omisión, incluso en desacato a una autoridad judicial, al negarle la posibilidad de cursar estudios de secundaria en el sistema de educación básica, supuestamente porque ya es un “adulto”.
Ramírez Ruiz expuso que su hijo, Diego Gual Ramírez, alcanzó en efecto la mayoría de edad, pero debido a que nació con una genopatía en estudio, una variación rara de la trisonomía 21, que se asemeja al síndrome Down, su desarrollo intelectual en este momento corresponde al de un niño de 11 o 12 años.
Diego asistió a una escuela privada, que opera con una política incluyente, en la que completó los estudios de primaria a los 15 años.
Luego de ser sometido a un procedimiento quirúrgico que le llevó dos años de recuperación, el año pasado su madre intentó inscribirlo en el nivel Secundaria, pero el sistema del IEBEM lo rechazó porque para el inicio del ciclo escolar 2023-2024, Diego ya tendría 18 años de edad.
Ante la negativa de los funcionarios de hacer una excepción, Graciela promovió un juicio de amparo con el que consiguió que en enero pasado un juez ordenara al IEBEM la inscripción del joven en menos de 24 horas; sin embargo, la orden no ha sido acatada, a pesar de las dos multas que el juez ha impuesto a las autoridades.
La madre de Diego agregó que si cursó la primaria y obtuvo un certificado con reconocimiento oficial, tiene derecho a continuar sus estudios en el mismo sistema; pero debido a que el sistema de inscripciones lo cataloga como un adulto, le están negando la posibilidad a pesar de que la Nueva Escuela Mexicana es incluyente, por lo que apela a que las autoridades reconsideren.