Mientras los tres periodistas esperaban entrar a la rueda de prensa del “mañanero”, comenzaron a discutir sobre los conflictos entre los nueve gobernadores que se querían separar del gobierno federal pidiendo su independencia porque Andrés Manuel López Obrador no les quiso firmar de aval los miles de millones pedidos al Banco interamericano, no tuvieron tiempo de usar el tapabocas, antes de que los corrieran del edificio.
El fotógrafo Zaldívar comentó que lo que declaró Lozoya fue una enorme sacudida para los gobernadores que los dejó con la boca abierta, continuó diciendo sobre la petición que le hicieran al Secretario de Salud y el gobierno buscara a quien explique mejor que el doctor Hugo López Gatell cómo ponerse el tapabocas, el que ningún gobernador aprendió a usar y los que le pidieron al presidente que Hugo fuese removido de su puesto. No les hizo caso pues no había nadie en México que supiera más que él y lo pudiera suplir.
El reportero Larios trató de explicar lo de las responsabilidades de ciertos rectores de universidades públicas, donde era obligatorio usar el tapabocas respecto a la fallida petición de Rosario Robles, ya que ni con su cubre bocas puesto la dejaron salir de la cárcel.
Uno habló del fraude del Etileno XXI en que dejaban en la calle a Pemex al no tener el suficiente gas para cumplir con el contrato, los diarios y las televisoras se tuvieron que quedar callados y ponerse el tapabocas porque ninguno sabía explicar la razón de qué se trataba ese problema y para no echar a perder la plática pues se trataba de millones de pesos. Los periodistas también se colocaron sus tapabocas, mientras los dueños se quedaron criticando y siguieron cobrando sus moches.
El reportero Garza comentó lo de la privatización del Puerto de Veracruz por 100 años en total o como dicen los que tuvieron conocimiento de ese caso, lo más importante de todo es ¡su tapabocas!
-“Para qué necesitamos el tapabocas si no somos médicos ni vamos a ayudarles a operar”, mientras el mismo doctor López Gatell que opinó así, cambió de parecer y recomendó que todos usáramos ese cubre bocas, para evitar que el virus entrara por las fosas nasales; otros explicaban que los trapos esos eran para que no fueran a contraer el coronavirus. Luego que sólo lo necesitaban los que estaban enfermos y después el mismo que dijo eso, cambió a que los usáramos todos.
Si estamos confinados nos podemos quitar el cubrebocas. Por supuesto que sí, contestaron los especialistas; y cuando mostraron el semáforo se vio que todo el País estaba pintado de rojo, cambiaron de parecer y le pidieron a la gente que lo usara aún dentro del hogar, porque si no estás enfermo, por lo menos puedes ser portador.
¿Por qué los periódicos y los canales privados de televisión ya no hablan del caso de Lozoya y se la pasan hablando de los tapabocas?, ¿Por qué no les hacen caso sobre la petición para que López Gatell ponga su dimisión porque no ha dado a conocer exactamente la cantidad de fallecidos por causa del Covid-19 o el tiempo que falta para que la pandemia se termine en México? Y ¿Por qué el doctor López Gatell no ha sido llamado por sus superiores y así retirarse de una vez de ese cargo?
Ni tampoco se han interesado en la relación entre los gobernadores que se quieren separar de México y ahora están embarrados en los videos de Emilio Lozoya Austin y 18 políticos más. Por otro lado está el asunto de los refrescos azucarados de cola, de la comida chatarra, como los pastelitos Bimbo, que tienen más plástico que harina o chocolate, más lo que ellos dicen que es pan y son las sobras de lo que no han vendido los de las tienditas. Las papitas saladas llenas de sal y aceite. Todo esto y más, y como no le quieren poner etiquetas a las porquerías que venden, ahora ya les están prohibiendo la compra a menores de 18 años, no sólo en las escuelas, sino en todas las ciudades del País.
Pero no les interesa hablar de los fraudes de Etileno XXI donde hubo moches de más de 200 millones de dólares y están a punto de caer en el bote algunos expresidentes, gobernadores y empresarios que ya van saliendo en los videos. Porque también está lo de la privatización del Puerto de Veracruz, que ellos dicen que sólo es una pequeña concesión de 100 años y en el año 2994 nos lo van a regresar. Se imaginan el puerto, las aduanas, los barcos, las mercancías, la droga, el petróleo, etcétera.
Zaldívar explicó que por eso entró la Marina a poner orden en el puerto y en las aduanas de todo el País que antes estaban llenas de corruptos, pero en los grandes medios de comunicación nacionales ni media palabra. Pero eso sí, se la pasan hablando de los tapabocas, de las caretas de plástico y defendiendo el “derecho al trabajo” de sus obreros en las grandes fábricas en medio de la pandemia, donde se contagiaban más de la mitad de los trabajadores, también en los negocios al público como OXXO, Elektra y muchas más las que están abiertas al público sin siquiera darles tapabocas, gel y cloro para los zapatos de entrada. Y eso sí retando al señor presidente sólo porque tienen mucho dinero. Y el pueblo esperando a que les llegue su día…
Señor presidente, con su permiso le quisiera preguntar al doctor López Gatell para qué sirve el tapabocas y don Hugo le contestó “que esta era la 176 veces que explicaba para que servían, pero de todas maneras se los repetiré para que no se les olvide”. El tapabocas es para que los gobernadores del PAN se queden callados y no anden de habladores; para que los empresarios se dejen de criticar y le entren a las licitaciones cuando hay que invertir en México y no que se quejan cuando ya están firmados los contratos. Para ellos son los tapabocas y las caretas sin plástico para ver si se infectan al igual que sus trabajadores.
A los dueños de los periódicos nacionales y a los de las televisoras que si quieren seguir teniendo quien los lea y escuche, digan la verdad y dejen de publicar noticias falsas que a los que dañan no son a los políticos en el poder, sino al pueblo a quienes tienen muertos de miedo y ya no saben que pensar. Para esos “empresarios”, son los tapabocas dobles.
El reportero le preguntó cuánto tiempo duraría la pandemia y el doctor López Gatell contestó que el calculaba que pronto nos llegaría la vacuna a México, pero mientras, todo mundo tiene que llevar el tapabocas puesto.
Y yo qué voy a hacer con los 500 tapabocas que tengo en mi casa, gritó el fotógrafo y los periodistas protestaron porque sus familias estaban fabricando tapabocas para los próximos cinco años. Pues hay que seguir usando el tapabocas.
Rafael Benabib
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