En una extensa entrevista con el diario más importante del mundo, el presidente electo de los Estados Unidos, Donald Trump, se pronunció a favor de dejar atrás lo que describió como una "feroz" campaña presidencial para "ir hacia adelante".
Dejando atrás la retórica de su campaña, en donde incluso llegó a señalar que si fuera presidente Hillary Clinton estaría "encarcelada", Trump señaló el no querer dañar a los Clinton, señalando que se siente fuertemente a favor de dejar de lado las investigaciones sobre los correos electrónicos de Hillary, además de la relativa a los manejos de dinero de la fundación Clinton.
Sin ser cuestionado al respecto por los periodistas del Times, Trump señaló también el sentirse fuertemente a favor de comenzar a trabajar en un nuevo proyecto de ley de inmigración.
"Me siento fuertemente a favor de la salud. Me siento fuertemente a favor de un proyecto de ley de inmigración que siento que incluso pueda hacer feliz a la gente de esta oficina. Ustedes saben, han estado hablando de leyes de inmigración por 50 años y nada ha pasado", aseveró Trump, pese a que la última reforma migratoria aprobada en dicho país fue llevada a cabo hace tres décadas durante el gobierno de Ronald Reagan.
"Me siento fuertemente a favor de una ley de inmigración que sea justa y de muchas otras cosas", concluyó Trump sobre el tema, en uno de los muchos tópicos que retomó en la extensa charla con reporteros, columnistas y directivos del New York Times.