La polarización de ideas, la confrontación y las rupturas se hicieron presentes, más fuerte que nunca, esta semana en un partido político, y no, no me refiero a Morena, al PAN o al PRI, sino a Movimiento Ciudadano, lo cual resulta incomprensible porqué, siendo realistas, no aspira a grandes cosas en 2024, si acaso, por ahí, ganar posiciones en el Congreso de la Unión, en los Congresos estatales y una que otra alcaldía, eso, si no es que hasta en riesgo está el conservar su registro.
Si de algo no se puede culpar al partido naranja es de ser incongruente y, hasta el momento, ha cumplido a cabalidad con eso de que ‘con el PRI ni a la esquina’. Sin embargo, tal parece que el haber decidido no contender en las elecciones del Estado de México y Coahuila ya le empieza a pasar factura a Dante Delgado, pues, además de que una parte de la opinión pública lo acusó de hacerle el juego sucio a Morena, ahora es un fragmento de su militancia la que exige sumarse al Frente Amplio por México.
Tal como lo hizo el estridente Enrique Alfaro, actual gobernador de Jalisco, quien, además de recibir a Xóchitl Gálvez y darle el espaldarazo, también exhibió un documento donde los liderazgos naranjas en dicha Entidad exigían, no literalmente, pero poco les faltó, sumarse a la alianza opositora para poder desterrar a Morena del Gobierno, fuera tan sencillo como eso ¡ja! Todo esto, claro está, en contra de la línea que ha marcado y remarcado su partido, que es la de contender solos en 2024. Disidencia que el propio Dante Delgado ya desestimó.
La realidad es que el camino de ese instituto político ya está marcado e implica una apuesta que es muy arriesgada, ya que, todo parece indicar, están esperando que Marcelo Ebrard, al no ser el ganador de la encuesta, rompa con Morena y, ante tal situación, hacerle la invitación e integrarlo a sus filas. Difícilmente aceptará ser el candidato presidencial, pero bien podría ser líder de Movimiento Ciudadano el Senado, ese que tanto necesitan para poder construir los cimientos fuertes y necesarios para poder competir en la elección de 2030.
En caso de que Marcelo se quede en Morena, el camino sería otro, tal vez, ahora sí, ya con candidata definida en el Frente Amplio por México, unirse a la oposición, pero, como ya vimos, todo dependerá de lo que pase el 6 de septiembre, que es cuando Morena dirá quién será la o el heredero del Presidente Andrés Manuel López Obrador.
Así que no comamos ansias, todavía hay tiempo, para empezar, el proceso electoral, formalmente, todavía no inicia y recordemos que, en política, la paciencia, la constancia y, sobretodo, las circunstancias son imprescindibles, conceptos que, lastimosamente, muchas y muchos no entienden.
Podríamos ir en paz, pero mejor vamos con lo bueno, lo malo y lo feo.
Lo bueno: que Movimiento Ciudadano ya mero va a descongelar a ‘Yauwi’ para que nos siga deleitando con su ya tradicional: ‘na na na… na na na… movimiento naranja…el futuro está en tus manos…’. Lo malo: ya sea compitiendo solo o en coalición, la verdad es que, así que digamos que diferencia va a hacer MC en la elección del 24, pues no. Lo feo: Movimiento Ciudadano resultó no ser tan ciudadano.
No está de más decir que esto es a t´tulo personal.
Fijense nada más que... a partir de este lunes 28 de agosto y hasta el 3 de septiembre se levantarán las encuestas para elegir a la candidata o candidato (que no es candidat@) de Morena para contender por la Presidencia de la República en 2024. ¿Qué? ¿Por qué se ríe? ¿A poco cree que los dados están echados y #EsClaudia la ganadora?
Bueno, lo interesante es que esos resultados repercutirán en la selección de las y los candidatos a la gubernatura de los nueve Estados que también compiten el otro año, bueno, de ocho nada más, porque Chiapas ya se lo entregaron al Partido Verde.
Fuera de contexto... Uno de los tantos privilegios de los que gozan los que ocupan un cargo de elección, ya sea de mayoría relativa o de representación proporcional, además de los $ueldazos que cobran, es que pueden pedir licencia para separarse del encargo las veces que quieran y por el tiempo que consideren necesario, desde un cartón… digo desde un día, hasta por tiempo indefinido.
¡Qué agusticidad!, dijera Don Silverio Gaitán Uribe. ¡Saludos!
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