Cuando se habla de depresión, muchas personas piensan en la depresión clínica, esa que paraliza emocional y físicamente, impidiendo a quien la padece llevar una vida normal. Sin embargo, existen otras formas menos evidentes de esta enfermedad, como la depresión de alto funcionamiento, también conocida como trastorno depresivo persistente.
A diferencia de la depresión mayor, esta condición permite a quien la padece levantarse cada día, cumplir con sus responsabilidades y mantener, al menos en apariencia, una vida normal. Es precisamente esta capacidad de funcionar lo que puede hacer que la depresión pase desapercibida, tanto para el entorno como para la persona que la sufre.
Una lucha silenciosa
Quienes viven con depresión de alto funcionamiento suelen enmascarar sus síntomas tras una fachada de eficiencia y normalidad. Aunque puedan mantener rutinas, estudios o trabajo, internamente enfrentan una lucha constante. Esta condición puede desarrollarse de forma lenta y silenciosa, y muchas veces no es reconocida ni tratada adecuadamente.
Síntomas comunes
Los síntomas pueden variar de una persona a otra, pero entre los más comunes se encuentran:
- Insomnio o exceso de sueño
- Comer en exceso o pérdida del apetito
- Cansancio constante
- Sentimientos de desesperanza o tristeza persistente
- Baja autoestima
- Aislamiento social
- Dificultad para tomar decisiones
- Es importante recalcar que no todos los síntomas aparecen al mismo tiempo ni con la misma intensidad, lo que complica aún más su identificación.
- El riesgo de no pedir ayuda
Muchas personas con depresión de alto funcionamiento ignoran su malestar, minimizan sus emociones o evitan buscar ayuda por miedo a romper la rutina o parecer débiles. Sin embargo, esta actitud puede empeorar el cuadro y llevar, con el tiempo, a trastornos más graves.
Pedir apoyo no es un signo de debilidad, sino un paso valiente hacia una vida más plena y saludable. Si sospechas que tú o alguien cercano podría estar viviendo con esta forma de depresión, consultar a un profesional de la salud mental es fundamental.