La reducción del 52 por ciento en contagios en Cuernavaca, al pasar de 99 a 52 en cinco semanas del 5 de julio al 8 de agosto, es un logro de la población en general, de comerciantes, empresarios, trabajadores y de las autoridades municipales, pero es vital insistir en las medidas preventivas para mantener esa tendencia a la baja, afirman integrantes del Comité Municipal de Contingencia COVID-19.

La doctora Ana Burguete, investigadora del INSP, consideró que de continuar así, en un par de meses la capital podría llegar al semáforo en amarillo

Para eso, insistió en evitar reuniones familiares, cualquier tipo de aglomeración en espacios cerrados, uso permanente del cubrebocas, gel y sana distancia.

Otros municipios deben prevenir más

Sin embargo, la especialista explicó que el semáforo epidemiológico es un indicador a nivel estatal, por lo que municipios como Cuautla, Zapata y Yautepec, entre otros, deben también incrementar las acciones preventivas, sobre todo en lo que concierne a aforo en espacios públicos y transporte público, y evitar fiestas, reuniones familiares, para no propiciar contagios comunitarios.

Otro factor de esa baja de cifras, dijo, es el manejo médico desde el inicio de los primeros síntomas.

Por Redacción DDM / local@diariodemorelos.com

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