Desde su llegada a la pantalla chica, los suscriptores de Netflix han disfrutado de la posibilidad de compartir las contraseñas de una única cuenta, lo que hasta ahora, no ha sido un problema.
Por otro lado existe una competencia cada vez más reñida y sobre todo, del aumento de costos y perdida de potenciales clientes, las cosas al parecer dejan de ser fáciles para la compañía de entretenimiento.
Hasta hace poco, compartir la contraseña de una única cuenta de Netflix era uno de los nuevos hábitos de consumo que el canal por suscripción implantaba casi sin querer, de acuerdo con datos revelados recientemente en un informe del periódico “The Independent”, cerca de un 10% de la franja de suscriptores de la plataforma.
Esto permite que familiares y amigos usen su cuenta de manera gratuita, equivale aproximadamente 13,7 millones de personas no pagan por el uso del servicio y de hecho, no son clientes registrados.
Aunque todavía no hay planes reales en marcha para detener de manera total el intercambio de contraseñas. Los director ejecutivo insistió que está trabajando en la implementación de “mejores prácticas” que evitarán que compartir las cuentas se conviertan en un problema más grave de lo que ya es. Esto incluye limitar la cantidad de dispositivos que pueden transmitir simultáneamente desde una sola cuenta, algo que ya hacen algunos servicios de transmisión.