Puebla.- La arquitecta del ring. Con el corazón latiendo a mil por hora, Gabriela Ivonne Sotelo Moreno brilló en la Universiada Nacional 2025, celebrada en la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla (BUAP), al conseguir medalla de plata en boxeo, en la división 57-60 kilos.
Desde Chamilpa, Cuernavaca, la boxeadora de 20 años, estudiante de Arquitectura, combina su pasión por su carrera con la fuerza y disciplina del bo. Representando con orgullo a la Universidad Autónoma del Estado de Morelos (UAEM), no sólo conquistó el podio, sino también el reconocimiento de toda la comunidad universitaria.
“Competir en esta justa fue una mezcla de nervios y emoción. Desde antes de competir ya sentía esa adrenalina, pero también muchas ganas de darlo todo arriba del ring. Sabía que había trabajado muy duro para estar ahí, así que traté de disfrutar cada momento”, compartió la morelense.
El triunfo no fue únicamente individual. Gabriela lo sintió como una victoria compartida con su equipo, el Taller de Box FAUAEM, con quienes ha entrenado y forjado lazos más allá del deporte.
“Cuando gané la medalla fue una emoción enorme. Me esforcé muchísimo por llegar hasta donde estoy. Fue muy especial porque no sólo era una medalla para mí, sino para todo el equipo. Sentí mucho orgullo de poder poner en alto el nombre de mi universidad y de mi estado”, declaró.
La joven boxeadora también agradeció a quienes han sido clave en su formación deportiva: “Le dedico este triunfo a mis entrenadores Penny Tinoco Lamadrid y Rodolfo Contreras, que siempre están al pendiente de mí. Sin duda alguna, esto no habría sido posible sin ellos.”
Gabriela comenzó a practicar boxeo a los 16 años, aunque su fascinación por este deporte nació a los 14, cuando aún cursaba la secundaria.
“Ahí conocí a dos amigos que eran boxeadores y desde que los vi entrenar me llamó muchísimo la atención. Desde ese momento nació mi inquietud por el boxeo”, recordó.
Cuatro años después de haber subido por primera vez a un ring, Gabriela Sotelo no sólo es una medallista universitaria, sino también un ejemplo de constancia, entrega y pasión por lo que se ama. Su historia es testimonio de que los sueños se pueden construir golpe a golpe, como una obra bien planeada, como una arquitecta del ring.