La Embajada de Estados Unidos en México ha reforzado sus procedimientos de análisis para la emisión de visas, poniendo especial énfasis en la evaluación de las redes sociales de los solicitantes. Esta medida forma parte de una estrategia más amplia del gobierno estadounidense para fortalecer los controles migratorios y garantizar la seguridad nacional.
Desde 2019, las autoridades consulares han solicitado a los aspirantes a visa que proporcionen los identificadores de sus cuentas en plataformas como Facebook, Instagram, X (anteriormente Twitter), YouTube, LinkedIn, TikTok, entre otras. La revisión abarca las publicaciones realizadas en los últimos cinco años y busca detectar comportamientos que puedan representar un riesgo para la seguridad de Estados Unidos, como vínculos con actividades delictivas, discursos de odio o apoyo a organizaciones consideradas terroristas.
Recientemente, el Departamento de Seguridad Nacional (DHS) ha ampliado estas políticas, permitiendo que las autoridades migratorias revisen las redes sociales de solicitantes de residencia permanente, estudiantes internacionales y personas afiliadas a instituciones educativas. Este escrutinio se centra en identificar contenidos antisemitas o que respalden a grupos catalogados como terroristas, como Hamás, Hezbolá o los hutíes de Yemen.
Además, el gobierno estadounidense ha anunciado restricciones de visado para funcionarios extranjeros y personas que, según su criterio, censuren la libertad de expresión de ciudadanos estadounidenses. El secretario de Estado, Marco Rubio, ha enfatizado que aquellos que socaven este derecho no deberían tener el privilegio de ingresar al país.
La Embajada también ha emitido advertencias sobre el uso de terceros para la tramitación de visas, señalando que recurrir a intermediarios no autorizados puede conllevar errores en la solicitud y poner en riesgo la información personal del solicitante.
Estas medidas reflejan un endurecimiento en las políticas migratorias de Estados Unidos, donde la transparencia y el cumplimiento de las normativas son esenciales para la aprobación y mantenimiento de las visas. Los solicitantes deben asegurarse de que su actividad en redes sociales y la información proporcionada en sus solicitudes sean coherentes y verídicas para evitar sanciones o la denegación del visado.