El Agujero de la Capa de Ozono sobre la Antártida ha alcanzado dimensiones extraordinarias, marcando uno de los mayores registros registrados hasta la fecha, según la Agencia Espacial Europea (ESA). Informes recientes indican que ha alcanzado los 26 millones de kilómetros cuadrados, aproximadamente tres veces el tamaño de Brasil, siendo uno de los más grandes jamás registrados.

Crecimiento inusual

Según la científica principal del Servicio de Monitoreo de la Atmósfera Copernicus, Antje Inness, el agujero ha experimentado un crecimiento excepcional desde agosto, destacándose como uno de los mayores agujeros de ozono registrados. La ESA, mediante su satélite Copernicus Sentinel-5P, sigue de cerca este fenómeno, utilizando la tecnología avanzada de Tropomi para obtener imágenes precisas de los contaminantes atmosféricos.

Posible causa del crecimiento

Aunque aún es temprano para determinar la causa exacta, algunos investigadores sugieren una posible conexión con la erupción del volcán submarino Hunga Tonga-Hunga Ha'apai entre diciembre de 2021 y enero de 2022. La erupción liberó una cantidad significativa de vapor de agua en la estratosfera, potencialmente contribuyendo al crecimiento inusual del agujero.

Contexto histórico

La degradación de la capa de ozono se originó en las décadas de 1970 y 1980 debido al uso generalizado de clorofluorocarbonos en productos como refrigeradores y aerosoles. Este fenómeno generó un agujero sobre la Antártida, cuyo tamaño varía debido a la influencia de la fuerte banda de viento alrededor de la región antártica.

Avances positivos

A pesar de este retroceso, el informe del Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente en enero sugiere que la capa de ozono está en vías de recuperación. Las emisiones de sustancias dañinas han disminuido drásticamente gracias al Protocolo de Montreal, un acuerdo internacional adoptado en 1987. Los científicos prevén que la capa de ozono global se restablecerá alrededor de 2050.

Impacto en el cambio climático

El Grupo de Evaluación Científica del Protocolo de Montreal destaca que esta recuperación será fundamental para frenar el cambio climático. Se estima que la restauración contribuirá a evitar entre 0.3 y 0.5 °C de calentamiento global para el año 2100, marcando un hito clave en la lucha contra el cambio climático.

A pesar del alarmante crecimiento actual del agujero de la capa de ozono, los avances positivos en la reducción de emisiones sugieren un camino hacia la recuperación. La importancia de preservar la capa de ozono se destaca como un componente crucial en la mitigación del cambio climático y en la protección de nuestro planeta.

 

Cumple los criterios de The Trust Project

Saber más

Síguenos en Google Noticias para mantenerte siempre informado

Sigue el canal de Diario De Morelos en WhatsApp