El ingeniero Constantino de Tárnava Garza (1898-1974), en octubre de 1921 había logrado transmitir desde Monterrey lo que se consideró la primera señal de radio en México; ésta fue captada solamente por un fabricante de acumuladores en el Distrito Federal y por el gerente del Banco Regional de Monterrey. Este hecho marcó el inicio de la radio en nuestro país, por lo que el ingeniero Tárnava es considerado el pionero y padre de la radiodifusión en México y Latinoamérica.
Poco a poco más mexicanos se sumaron a la radio experimentación, como el Sr. Miguel Ángel Tenorio Benítez, que en 1938 solicitó a la Secretaría de Comunicaciones y Obras Públicas un permiso para operar una estación de aficionados en la calle de Mariano Matamoros de Cuernavaca. Le otorgaron la banda de 20 y 40 Mts. y las nominales fueron XE1KN. Asimismo, se afilió a la Liga Mexicana de Radio Experimentadores de la República Mexicana. Mediante esta estación se comunicaba a varias partes de la República y del extranjero. Al poco tiempo designó a su hermano Carlos como segundo operador.
Gracias a ese equipo estableció amistad con varios radioaficionados entre los cuales se encontraba Eduardo Jiménez de la Cuesta, quien vivía en la Ciudad de México, además de que tenía una casa de fin de semana en la calle de Morelos, en Cuernavaca. Sábado y domingo se reunía con Miguel Ángel Tenorio. para platicar personalmente.
Al estallar la Segunda Guerra Mundial, la Secretaría de comunicaciones y transportes decidió suspender toda la actividad de los radioaficionados por motivo de seguridad nacional. Esto ocurrió el 1º de diciembre de 1941, siendo Maximino Ávila Camacho, hermano del presidente el titular de esa secretaría. Posteriormente, nuestro país declararía formalmente el estado de guerra contra las potencias del eje el 22 mayo de 1942. Fue entonces que don Eduardo Jiménez le propuso a Miguel Ángel gestionar los permisos para establecer una estación de radio AM. Mientras les daban el permiso, se dieron a la tarea de construir ellos mismos una planta transmisora, adquirieron una consola mezcladora y compraron muchos discos.
Finalmente le otorgaron la concesión a don Eduardo para operar con las nominales XEJC. Por acuerdos internacionales las iniciales XE corresponden a la República Mexicana y JC a Jiménez de la Cuesta, como lo solicitó él mismo. Sin embargo, muchos cuernavacenses pensaron que eran de Jesús Castillo López , entonces gobernador del Estado, quien inauguró la estación el 15 de mayo de 1943, con un control remoto desde el cine Morelos, en el que participaron varios artistas locales y de la Ciudad de México.
En 1947, por problemas financieros don Eduardo Jiménez le propuso a Miguel A. Tenorio que le comprara la estación, discutieron las condiciones y el Sr. Tenorio quedó como gerente propietario, liquidando la estación antes del tiempo estipulado. Obtuvo la sesión de derechos el 18 de mayo de 1950 y en febrero de 1955 decidió formar una sociedad con su hermano Carlos, sin que él realizara ninguna aportación. La sociedad se denominó Negocios Modernos S. de R.L. y cada uno tenía el 50%. Carlos sería el encargado de la Administración.
Inicialmente la estación se instaló en la casa de don Eduardo Jiménez, y en 1944 se trasladó a los altos del cine Morelos. Su planta transmisora estuvo por algún tiempo al sur del panteón de La Leona, por la calle de Bajada al Salto de San Antón, en la privada que continúa llamándose XEJC. En 1952 cambiaron sus oficinas a la calle de Arista No. 39, entre Matamoros y Morelos. Ese lugar contó con un Teatro Estudio con capacidad para 100 personas al que llamaron Gonzalo Curiel.
El lema de la estación fue “La voz del Sur” y en sus estudios se presentaron un gran número de artistas como: Olga Salas, Heberto Lasso, Armando Reza, la marimba de los Hermanos Escobedo, el conjunto musical de Chava Arvizu y muchos mariachis y tríos de aquella época.
Asimismo, por los micrófonos de la XEJC pasaron magníficos locutores con excelente dicción, sonoridad y soltura oral como: Roberto Armendáriz, Ricardo Barrueta, Antonio y Agustín Velásquez Mora, Pablo Rubén Villalobos, Germán Figaredo y el mismo Miguel Ángel Tenorio, entre otros.
En 1962 la sociedad obtuvo una nueva concesión para operar una nueva estación, pero ahora de FM, a la que llamaron Radio Primavera, con las siglas XHTB. Dicha estación es recordada por su programación con música de las grandes orquestas (big bands) norteamericanas, como la de Glenn Miller, Tommy Dorsey, Benny Goodman, además de directores de orquestas y arreglistas como Ray Coniff. También incluían a otros músicos internacionales como los franceses Poul Muriat y Franck Pourcel.
Después de algunas diferencias, en 1967 los hermanos Tenorio decidieron disolver la sociedad, cada uno se quedaría con una estación. Carlos propuso un volado, pero Miguel A. no lo aceptó. Fue mediante un sorteo de la Lotería Nacional que decidieron su suerte, cada uno con 5 números. Carlos se quedó con XHTB y Miguel Ángel con la XEJC que operó hasta 1981, cuando la adquirió Grupo ACIR.
