Post Data: ¡Los tres fueron priístas..! El reciente resbalón del admirado por unos y vilipendiado por otros Porfirio Muñoz Ledo, quien en su longevidad con sus saberes políticos y colmillo retorcido, bien aprovechado ha sido por Andrés Manuel López Obrador para ser usado como Pastor de la Cámara de Diputados, por todo lo que se le ofrezca al Señor Presidente de la República… Aunque ambos con su habilidad Política característica y sus mañas salen socarronamente para decir no, cuando es sí, o decir sí, cuando es no, como que Porfirio SI metió la pata ante los medios de comunicación al ser cuestionado sobre Olga Sánchez, la secretaria de Gobernación, a la cual el diputado Muñoz Ledo “renunció” como titular de tal Dependencia, luego de que Olga declarara inconstitucional el asunto de Baja California, cuyo Congreso del Estado pasando por encima de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, acordó otorgarle al Gobernador electo de dos años para ese Estado, por cierto muy amigo de Andrés, una ampliación de tres años más de mandato para ejercer su Poder en aquella entidad... Cuando Muñoz Ledo volvió a ser cuestionado por su lapsus, luego de que los de los medios le advirtieron que Olga Sánchez seguía siendo la Ministra de Gobernación, simplemente entre otras cuestiones socarronas incoherentes, le deseó lo mejor de lo mejor y le mandó sus abrazos, besos y saludos, que no sabemos si sean suficientes para “su amiga” Olga… Por cierto, Porfirio para no ser menos que Andrés Manuel, se sacó un dicharacho de la bolsa al dejar entrever que las cuestiones del Gobierno de la República, en los espacios del Ejecutivo por cuanto a su Gabinete “están de a peso”, lo cual popularmente se interpreta, que están cabestras o de la patada, salvo que los ex de tantos partidos, López y Muñoz, lo nieguen, lo afirmen o todo lo contrario... Cuando referimos al trío de tres al cual incorporamos a Cuauhtémoc Cárdenas Solórzano, lo hicimos en ánimo de recordar su longeva participación en los quehaceres de la Política a la Mexicana, pues los tres tienen características similares en común... Los tres fueron secretarios de Estado… Los tres brincaron de un Partido Político a otro... Los tres fueron dirigentes de Partidos Políticos... Los tres son políticamente priístas, en su origen... Los tres aspiraron o ambicionaron llegar a la presidencia de la República… Cuauhtémoc se quedó en el umbral de las puertas del Palacio Nacional acompañado por Porfirio, luego de que su Partido Frente Cardenista de Reconstrucción Nacional, ganara de calle las elecciones de 1988, pero “se las perdieron”, gracias a que al entonces Secretario de Gobernación, hoy protegido por Andrés Manuel, en esos tiempos del presidente Miguel de la Madrid, al poblano o no poblano Manuel Bartlett Díaz, “se le cayó el sistema”, que fue la patraña o burda explicación y maniobra para hacer Presidente del País a Carlos Salinas de Gortari contra todo derecho democrático, y así dejar fuera a Cárdenas Solórzano y su entonces incondicional acompañante, Muñoz Ledo... Para ese entonces, ya asomaba la cabeza como priísta Andrés Manuel, quien ocupó puestos aquí y allá para luego hacer algunas de sus tropelías y movilizaciones, que a final de cuentas a él sí lo llevaron mayoritariamente por lo electoral, como Presidente al Palacio Nacional... No sabemos en qué momento se dio el quiebre entre Cuauhtémoc y López Obrador, en lo cual algo tuvo que ver Porfirio, precisamente en ánimos de que no se distanciaran, pero hasta la fecha, la sana o nada sana distancia entre el michoacano y el tabasqueño existe, pues nunca han estado en el mismo estrado ni en la campaña electoral, ni en los mítines o reuniones de trabajo del ahora Presidente de la República... También debemos referir que en el caso de estos tres personajes políticos a la mexicana, muchas de sus acciones, declaraciones y presencias públicas tienen verdadera trascendencia nacional e internacional, sobre todo entre las naciones de los gobiernos presuntamente socialistas, con repercusión hacia los otros de los clamados neoliberales o capitalistas, cuyos gobiernos o representantes en la distancia, solamente mantienen sus precauciones... (Continuará..) ¡Hasta mañana que será un día más..!
Pablo Rubén Villalobos
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