La fundación Sueño Lúcido abrió en el centro de Cuernavaca su primera cafetería con causa, un espacio sin fines de lucro que destina sus ganancias, después de cubrir gastos operativos, a impulsar proyectos de arte y música como herramientas de cambio y expresión auténtica.
Pepe Ramírez y Alfonso Lazcano, cofundadores de la fundación, explicaron que el lugar lleva por nombre Ukiyo, una palabra japonesa que significa “el mundo flotante”.
“Para nosotros, Ukiyo es ese instante en que el tiempo se suspende, el corazón se abre y todo parece posible. Cada bebida que preparamos, cada historia que compartimos, está llena de intención. Aquí no solo vienes a tomar algo, sino a contribuir y formar parte de una comunidad que cree en el arte como forma de transformación”, señalaron.
Además de la cafetería, el espacio cuenta con una galería que ofrece su primera oportunidad de exposición a artistas emergentes. También organiza actividades que buscan fortalecer los lazos entre creadores, familias, empresas y donantes, con la intención de formar una comunidad creativa que inspire y comparta.
Los fundadores adelantaron que uno de sus siguientes proyectos consiste en instalar un estudio de grabación gratuito para músicos emergentes. “Lo primero que necesita un artista es material y grabar con buena calidad es muy costoso. Tener un estudio accesible en el Centro de Cuernavaca puede marcar la diferencia”, afirmaron.
Invitaron a la ciudadanía a sumarse y apoyar de distintas maneras, desde comprar una bebida, una gorra o un libro, hasta adquirir obras de arte o realizar donaciones deducibles de impuestos. “Hay opciones para todos los niveles de apoyo. Lo importante es entender que el arte no es un lujo, es una necesidad. Muchas asociaciones cubren necesidades paliativas, pero el arte transforma desde la raíz”, señalaron.
Finalmente, destacaron que, en una época dominada por la tecnología y la inteligencia artificial, es urgente revalorar la labor del artista. “El arte nos permite conocernos a nosotros mismos y entender a los demás. Hoy más que nunca, necesitamos espacios como este para defender lo humano”.
