Por “guerra sucia” se entiende que uno de los bandos no juega limpio, que no respeta las reglas, por lo regular es cobarde, se asume incógnito pero sus contrincantes lo tienen perfectamente identificado.
Segundo de a bordo del Ayuntamiento de Cuernavaca, Erick Santiago Romero Benítez acusa que el alcalde Antonio Villalobos es objeto de una guerra sucia en redes sociales.
De hecho, el señalamiento resulta innecesario; la guerra cochambrosa es evidente, cualquiera la puede constatar en el facebook y etc.
Son los politiqueros a quienes nada de lo que hace o deja de hacer el edil Lobo les parece bien, así que con perdón del amigo lector aplica el dicho popular de que están como la gata Flora: lloran si se la introducen y lloran si se la sacan… LO MEJOR que le puede pasar al fiscal estatal Uriel Carmona Gándara, sería que la Fiscalía General de la Nación atrajera la investigación del asesinato de Alfonso Isaac Gamboa Lozano, el extitular de la Unidad de Política y Control Presupuestal de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) que fue ejecutado el jueves pasado en su casa del fraccionamiento Brisas ubicado en el municipio de Temixco.
Para nada necesita estar en el caso sobre la típica presunción de que la víctima sabía demasiado y de ahí la especulación del móvil según el cual Alfonso Isaac habría sido callado.
La incomodidad política para la competencia local se deduce del manejo mediático del hecho, como estas perlitas que coinciden con muchas otras: Una: El fiscal general de Chihuahua, César Augusto Peniche Espejel, aseguró que el extitular de la Unidad de Política y Control Presupuestal de la SHCP, Alfonso Isaac Gamboa Lozano, tenía mucho que aportar en la investigación de desvío del erario público del ramo 23, en beneficio del Partido Revolucionario Institucional (PRI).
Dos: La muerte de Gamboa Lozano cayó como un golpe seco al interior del gobierno.
Santiago Nieto, mandamás de la Unidad de Inteligencia Financiera, estaba tras la pista de este ex funcionario en el marco del affaire Odebrecht, que la UIF investiga y que tiene al director general de Pemex, Emilio Lozoya, como protagonista excluyente.
Si bien Gamboa Lozano era persona de interés por los desvíos de recursos en estados como Chihuahua, Veracruz y Tamaulipas, en los últimos meses su nombre aparecía en la trama Odebrecht.
En el entorno de Peña Nieto creen que Lozoya, desde la prisión madrileña, podría tener que ver con esa nueva línea de investigación.
Una hipótesis que hace estremecer al priismo a horas del asesinato.
Tres: Gamboa Lozano redactó en 2016 los convenios para otorgar 250 millones de pesos para el “Fortalecimiento Financiero” del gobierno de César Duarte, mismos que fueron transferidos al tricolor.
Cuatro: El ex funcionario era considerado pieza clave, en las investigaciones sobre transferencias multimillonarias, realizadas desde la SHCP a por lo menos seis entidades de la República, en el sexenio de Enrique Peña Nieto… El fin de semana cruzó sin pronunciamientos de priistas de primer nivel, y tampoco las hubo en el nivel inferior, hecho mutis el presidente del PRI estatal, Jonathan Márquez, no obstante su proclividad a opinar sobre cualquier cosa.
Junto con Alfonso Gamboa fueron ultimados a tiros su madre, dos hermanos y una hermana.
Se ignora si hoy lunes el fiscal Carmona ofrezca o no una rueda de prensa sobre el estado que guarda la investigación, si avanza o está paralizada.
Sin deberla ni temerla, Morelos se halla en el ojo del huracán, lo que debe decirse ha sucedido en otras ocasiones… (Me leen después).
Por: José Manuel Pérez Durán / jmperezduran@hotmail.com
