Para la historia: la del sábado anterior quedará como la fecha del primer fallecimiento en Morelos por el Covid 19, un hombre de 37 años, joven, con el antecedente de haber viajado recientemente a Estados Unidos. En tanto, sobre la pandemia la tarde del mismo día la Secretaría de Salud reportó: infectados, 6; sospechosos, 26, y descartados, 50. Del cólera virus o Covid 19 viene hablándose en el mundo y, por asociación de ideas, escribiéndose a propósito de algunas epidemias históricas, como la viruela de la que se señala aún no había terminado la conquista cuando se produjo.
Esto en el libro “Historia de las Epidemias en el México Antiguo. Algunos aspectos biológicos y Sociales” que subraya: la segunda epidemia ocurrió en 1531 y vino también por parte de los españoles. Fue el sarampión que se propagó rápidamente entre los indígenas y muchos murieron, aunque no tantos como con la viruela; sin embargo, produjo grandes estragos. Al sarampión lo llamaron “záhuatl tepiton”, que quiere decir lepra chica, para distinguirla de la viruela. Sólo 14 años después, en 1545 sobrevino la tercera epidemia del siglo XVI llamada “Cocoliztli”. Se caracterizó por síntomas como pujamiento con sangre y fiebres altas, un padecimiento febril hemorrágico con un síndrome cólico sangriento que causó gran mortandad entre los indígenas.
A éstas siguieron otras epidemias que marcaron a nuestros antepasados. Alfonso Vallejos Parás, académico del Departamento de Salud Pública de la Facultad de Medicina de la UNAM, narra que una de las epidemias más devastadoras de la antigüedad fue la “Peste de Atenas” que se propagó en el año 428 a.C., durante la Guerra del Peloponeso, mientras que en México la viruela se conoce como la epidemia más catastrófica en el período de la conquista, aunque muy probablemente hubo otras enfermedades que le antecedieron. Este epidemiólogo considera que la pandemia de influenza en 1918, ha sido el peor episodio de enfermedad que ha vivido el mundo, pues se estima que 40 millones de personas fallecieron a causa de este padecimiento.
El que una enfermedad se convierta en epidemia tiene que ver con el número de casos y la forma en que ésta se transmita. Normalmente, las que se transmiten por vías respiratorias suelen ser más agresivas que las que se contagian por contacto o por algún vector. Es decir, el corona virus, pero este entre países… En el encierro de la cuarentena –obligatoria en no pocos países, so pena de cárcel a quienes la rompan– la literatura ofrece lecturas interesantes, amenas. “El Periódico”, de Barcelona, subraya dos resúmenes. “El amor en los tiempos del cólera”, de Gabriel García Márquez, 1985: Uno de los grandes éxitos del gigante del boom es esta historia de amor en escenario pandémico.
En realidad a Gabo, hijo de un boticario amante de la homeopatía, no le interesa demasiado retratar la plaga en su cruda realidad científica sino más bien como un contrapunto del mal de amores que sufren los protagonistas, Florentino Ariza y Paulina Daza, que son separados por imposiciones familiares. En esta historia el autor quiso hacer un homenaje a sus padres quienes también tuvieron que luchar, aunque no tanto tiempo como en la novela, contra la oposición de los padres de ella…. Y “La máscara de la muerte roja”, de Edgard Allan Poe, 1848: Este famoso cuento de terror es una variación de las célebres danzas de la muerte medievales. En el relato, un grupo de aristócratas creen que pueden burlar a la muerte encerrándose en un castillo a disfrutar de placeres y bacanales mientras a su alrededor la plaga de la muerte roja (una variante sangrienta de la peste negra) hace de sus suyas. ¿Adivinan el final? La muerte no entiende de clases sociales… (Me leen después).
Por: José Manuel Pérez Durán / jmperezduran@hotmail.com
