Hace unas semanas, en la emisión que hacemos semanalmente de Vivencias Ciudadanas, tuvimos a un especialista de la UAEM, sobre quien nos informaron en la facultad de Biología, el Dr. Topiltzín Contreras, quien nos platicó sobre cada uno de los lagos de nuestro estado. La reunión tuvo como antecedente una visita a Tequesquitengo, donde el olor del lago era verdaderamente horrible; él explicó el problema de que el lago no es natural, sino un lago artificial en una cañada, que tiene forma de cono invertido y que, dependiendo del clima, una vez al año o más se voltea la parte inferior a la superficie, y al no estar oxigenada de la misma manera que la capa superior, hace que los peces se mueran y produzcan un mal olor superior; y ahora resulta que existen descargas residuales ilegales, lo cual desde luego empeora la situación. Por ese motivo la Comisión Estatal del Agua (Ceagua) impondrá sanciones económicas e incluso penales a los hoteles y domicilios particulares que contaminan el Lago de Tequesquitengo con sus descargas residuales, y que se clausurarán las descargas clandestinas, así como los hoteles que vierten sus aguas negras en el lago.
El titular Javier Bolaños indicó que trabajan en conjunto con la Secretaría de Desarrollo Sustentable (SDS), para la conformación de brigadas que se encarguen de la identificación de las descargas que vierten al lago y dañan la calidad del agua. “Está estrictamente prohibido verter agua cruda a los cuerpos de aguas superficiales”, acotó.
Tequesquitengo, por su belleza, es un lugar que ha producido muchos de los grandes fraudes al gobierno de Morelos; por ejemplo ese lugar se ha usado para presentar artistas como Plácido Domingo; esto sucedió cuando mucho diez veces y ahí está abandonado luego de ser un negocio de construcción para que alguien se quedara con el dinero. El sexenio pasado se les vendió irregularmente predios a funcionarios, a los cuales se les pidió que los devolvieran, cosa que no han hecho ni harán porque, al parecer, ya les llegaron al precio. El administrador del fideicomiso del lago, supuestamente, está coludido y sus amigos dicen que vive aquí muy tranquilo, así que es un lugar que se ha prestado durante muchos años al negocio en forma de cada régimen que pasa. Esperemos que ahora sí se ponga orden en el fideicomiso y, desde luego, que se detenga al gerente del mismo durante el sexenio pasado, lo mismo que a todos los que hayan tenido que ver con robarle algo al pueblo de Morelos; espero que los veamos en la cárcel y que regresen lo que se llevaron, porque pasan y pasan los meses y nos informan que se robaron tanto más cuanto, pero no pasa nada, nadie esta en prisión y mucho menos se ha regresado algo de lo que se llevaron.
En otro tema, la delincuencia sigue fuerte a pesar de lo que digan, y la instalación del Consejo Estatal de Seguridad, al parecer, puede dar buenos frutos, pero mientras sólo se llame a quienes están alrededor del régimen, para que como ciudadanos lo alaben, las cosas no servirán; hay que tomar a los líderes de las colonias, pero a los que luchan en favor de sus colonos, no a quienes la representación ciudadana les cae como del cielo, pero nada tienen que ver con la problemática de seguridad, que es el problema principal del estado; para que el asunto funcione hay que apoyar a aquellos que dicen que no y señalan los errores, que son los que verdaderamente sirven y, claro está, que no sean de partidos políticos, porque ya sabemos que ésos no sirven para nada más que para sacar raja de lo que sea.
La importancia de la representación ciudadana autentica es fundamental; los cuerpos colegiados sin oposicion en ellos no funcionan, son una manera de que todo parezca bueno sin ver la realidad; el 82% se siente inseguro de acuerdo con el Inegi, esta es la realidad, y qué bueno si bajó dos puntos, pero es el ochenta por ciento al que no les dice nada eso y hay que tenerlo en cuenta. Y es necesario que dejen de alabarse unos a otros, como si fuera una guerra de confetis.
La realidad es que nos sentimos inseguros, y lo cierto es que hay varios muertos diariamente en el estado; nos guste o no, esa es la realidad que esperemos que cambie pronto para beneficio de todos. ¿No cree usted?
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