Como era de esperarse, molestos por la falta de medidas importantes para atender adecuadamente la emergencia en Cuernavaca, el día de ayer empresarios obligaron al Ayuntamiento de Cuernavaca a diseñar un plan emergente inmediato con el fin de motivar la economía interna y así ayudar a conservar la planta productiva.
En una reunión a puerta cerrada que duró más de tres horas, lamentaron la indolencia de las autoridades, que simplemente permanecen pasivas sin saber qué hacer, al grado de que varios sectores registran caídas hasta del ocho por ciento en una emergencia que apenas está comenzando.
Al concluir la reunión, el llamado Grupo de los 19, con integrantes como Jorge Mátar Vargas, demandaron a la autoridad, ante las medidas que propone el gobierno de la capital, un plan emergente e inmediato para motivar la economía interna de la ciudad y del estado, para que de esa manera se pueda priorizar el tema de los empleados y que la gente no se vaya a su casa sin salario.
Pero también está el hecho de que las empresas puedan cuidar la productividad: “Estamos pidiéndole que haya un evento emergente e inmediato de cómo nosotros necesitamos realmente capital de trabajo para poder subsistir”, dijo el citado empresario.
La situación desde luego que es muy grave, porque al cerrar muchos de los negocios no habrá retroalimentación de recursos económicos y ello traerá como consecuencia que muchas gentes no cuenten con el salario normal. Por ejemplo, a un mesero en un restaurante más o menos caro le pagan 250 pesos por las ocho horas y le dejan las propinas para su beneficio, las que normalmente se juntan en una “polla” y se dividen entre todos; pero al no haber comensales un mesero sólo ganara los 250 pesos de los que hemos hablado y no le alcanzará para seguir viviendo y manteniendo a su familia, y si a ello le aumentamos el problema que tenemos con la caída del petróleo, hará que cada día sea más difícil salir adelante con el problema de la economía.
Las medidas tomadas ayer en la reunión son verdaderamente importantes y tratan de proteger a los propios empresarios y a sus trabajadores.
El empresario comentó que no buscan eludir su responsabilidad al pagar los impuestos, sólo abrir la posibilidad de desfasar la fecha de pago, incluyendo al IMSS, al Infonavit y las cargas fiscales, con la finalidad de que una vez que pase la emergencia se puedan calendarizar, porque al momento es urgente contar con capital de trabajo para mantener viva la empresa y, asimismo, continuar con la operación, porque a final de cuentas el objetivo es no cerrar las fuentes de empleo.
Bastante se tardó el Ayuntamiento en lograr sacar adelante estas medidas; la situación ya cambió y estamos en la segunda fase, que es el contagio entre nosotros mismos, así que la situación es verdaderamente delicada.
El empresario dijo que la emergencia no ha llegado en su plenitud y las pérdidas han comenzado a sentirse tanto en el área de la construcción, que alcanzó hasta un ocho por ciento, como en el área textil hasta con cuatro por ciento. “Tal vez en este momento nos queda la provisión para un mes, ¿pero qué va a pasar en abril y qué va a pasar si se detona el Covid-19?, no habrá capital para solventar estos empleos, y por eso debemos tener un trabajo de manera estrecha con el estado y la capital para saber qué hacer en las acciones inmediatas”, agregó el empresario.
Bien por lo empresarios que salieron a dar la cara en beneficio de todos y de ellos mismos, lo que necesitamos es buscar la manera de evitar el contacto de unos con otros para lograr que el virus se disperse lo menos posible; el esfuerzo es de todos y juntos podemos sacarlo adelante. ¿No cree usted?
Una felicitación al Alcalde por nombrar a Carlos Felix como vocero del ayuntamiento, es un hombre de medios, inteligente, honesto, decente. Felicidades.
Por: Teodoro Lavín León / lavinleon@gmail.com / Twitter: @teolavin
