Tras los meses de rumores sobre una posible compra de Ubisoft por parte de la compañía china Tencent, los múltiples fracasos económicos en lanzamientos por parte de la empresa francesa y diversas polémicas que rodeaban al estudio, finalmente tenemos la resolución.
Ubisoft ha anunciado la creación de una nueva compañía subsidiaria junto a Tencent, el gigante del mercado chino, pudiendo gestionar así sus franquicias más icónicas como Assassin's Creed, Far Cry y Rainbow Six.
De este modo, Ubisoft entregará una participación del 25% a Tencent tras una inversión de 1.160 millones de euros. La nueva empresa mantendrá los derechos exclusivos sobre las propiedades intelectuales de estas sagas bajo un sistema de regalías.
El CEO de Ubisoft, Yves Guillemot, mencionó que esta decisión representa “un capítulo clave en la historia de Ubisoft” y que supone lo mejor para la empresa, haciendo más ágil y ambicioso el desarrollo de proyectos sobre estas IPs.
Además, estas franquicias experimentarán nuevos cambios y crearán nuevas experiencias jugables, como contenido más frecuente, experiencias multijugador y títulos free-to-play.
La nueva subsidiaria incluirá estudios en Montreal, Quebec, Sherbrooke, Saguenay, Barcelona y Sofía, para seguir desarrollando títulos importantes para Ubisoft.
Tencent, al pasar a ocupar un rol de inversión minoritaria, tendrá una participación activa en la empresa, tomando decisiones clave y asegurando una serie de protecciones sobre su participación. Sin embargo, Ubisoft seguirá manteniendo la mayor parte del poder de decisión en torno a sus operaciones.
Esta medida es parte del plan de la empresa francesa para aumentar el valor en bolsa de la compañía sin que haya una adquisición de por medio.
Veremos cómo impactará esta decisión en los futuros juegos de Ubisoft, incluyendo las próximas entregas de Assassin’s Creed, el remake de Splinter Cell y nuevos títulos como Rayman.