El sismo de 5.7 grados Richter que estremeció la ciudad, dejó sin luz a decenas de miles de personas, implicó algunos daños y significó cerrar el aeropuerto local por precaución.
Aún se siguen evaluando los daños, sin embargo ya se encontraron edificios con paredes resquebrajadas, algunas derrumbadas y otras en situación delicada.
Además 55 mil personas se quedaron a oscuras pues se interrumpió el servicio eléctrico que se restaurará en las próximas 24 horas, informó la empresa de seguridad Rocky Mountain Power.
El apagón obligó a desalojar diversos centros de salud, entre ellos el laboratorio del Departamento de Salud que es precisamente el que recibe los llamados relacionados con el coronavirus.
Las autoridades de la ciudad llamaron a la calma y a que quienes ya se encontraban en sus casas trabajando remotamente, continúen haciéndolo, informó el medio Infobae.
Según el Servicio Geológico de Estados Unidos (USGS), el epicentro del movimiento telúrico se ubicó al sur del límite entre Utah y Idaho, se sintió a las 7:10 hora local, duró aproximadamente 15 segundos y se generó a casi 10 kilómetros de profundidad.

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