Cuando Ángela Vara Aragón se enteró que su hija, Selene García Vara, tenía una discapacidad intelectual, enfrentó el reto de lograr que aprendiera a vivir con la esa limitante, o que fuera presa del abismo.
Optó por la primera, y ayer informó, al lado de su esposo, Daniel Genovevo García Ramírez, de la sentencia que el Comité de la Organización de Naciones Unidas (ONU) sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad emitió sobre la queja que la familia, a nombre de su hija, promovió cuando una escuela de artes le negó su derecho a cursar una licenciatura.
Como informamos oportunamente, el pasado 28 de abril, la organización internacional condenó a México por no garantizar el acceso a la educación terciaria (universidad) inclusiva a una mujer morelense con discapacidad intelectual.
Es decir, a Selene García, que en 2014 intentó cursar la licenciatura en artes en el Centro Morelense de las Artes (CMA), pero le fue negado el ingreso con el argumento de que “no había presupuesto ni planes de estudio diseñados para personas con discapacidad en la educación superior”.
A más de ocho años de distancia, Selene cumplió 42 años, y cursa el 6º semestre de la Licenciatura en Artes en la Facultad de Artes de la Universidad Autónoma del Estado de Morelos (UAEM), a fuerza de tocar puertas, junto con su familia.
Por lo anterior, aunque la sentencia ordena al CMA garantizarle su acceso, eso ha quedado en el pasado, pero su madre y su padre, junto con su hermana, Briseida García, destacaron que ahora la relevancia de la sentencia no es que Selene ingrese a una escuela de estudios superiores, sino que cualquier persona con discapacidad en el país tenga ese derecho.
Briseida García señaló que la sentencia sienta un precedente importante para que, en adelante, la ciudadanía exija a las autoridades “establecer un sistema de educación inclusiva en todos los niveles, así como establecer mecanismos de denuncia y recursos legales independientes en casos de violaciones del derecho a la educación, así como concienciar y combatir los estereotipos y prejuicios relacionados con las personas con discapacidad”, entre otras observaciones contenidas en el documento.
ANTONIETA SÁNCHEZ / antonieta.sanchez@diariodemorelos.com