En la conferencia matutina de este martes, la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo aseguró que el despacho de crudo mexicano hacia Cuba responde principalmente a razones de solidaridad y cumplimiento de compromisos internacionales, y se ajusta a la legislación vigente, además de mantener una continuidad histórica en la relación bilateral entre ambos países. 

La mandataria detalló que dicho intercambio energético —que data de décadas atrás— forma parte de acuerdos y prácticas que han sido respetados por distintas administraciones sin importar su filiación política. Sheinbaum hizo referencia a momentos clave en esa cooperación, entre ellos la modernización de la refinería de Cienfuegos en los años posteriores al colapso de la Unión Soviética y la condonación de deudas por parte de gobiernos anteriores para reforzar lazos con La Habana. 

Además, subrayó que México fue uno de los pocos países que desde el comienzo se opuso al embargo impuesto por Estados Unidos a la isla, y que este tipo de intercambios se efectúan dentro del marco de soberanía nacional y respeto a normas internacionales. Sheinbaum también indicó que solicitará a Petróleos Mexicanos (Pemex) un desglose detallado de los volúmenes enviados, así como de los costos asociados al transporte y la logística.

Hasta el momento, la presidenta no ha anunciado ningún viaje oficial a Cuba, aunque afirmó que la temática energética y la colaboración entre ambos estados continua siendo una parte importante de la agenda diplomática. 

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