Hombre de respeto en todo el Estado de Morelos, el licenciado Rogelio Sánchez Gatica tiene una Maestría en Investigación Judicial. Fue presidente municipal y trabajó desde temprana edad en las labores que se le presentaran, logrando ser una persona entregada a su profesión y a su Cuernavaca.
Rogelio nació el cuatro de octubre de 1942 en el rancho Los Ángeles en Noxistlán, Oaxaca. Su papá fue Mauro Sánchez Espinoza quien era campesino y cuidaba de sus bienes hasta que se cambió a la Ciudad de México. Su mamá se llamó Maura Gatica Eras y se dedicó al cuidado de la casa. Fueron siete hermanos: Estela, Celia, Mercedes, Rogelio, Angélica, Juan y María Guadalupe.
Su papá llegó a Cuernavaca y al año mandó traer a la familia. Rogelio estudió la primaria en la escuela Artes Nacionales en San Antón, ahora llamada Gildardo S. Avilés y la terminó en la Escuela Benito Juárez, de la avenida Hidalgo, a un costado de la catedral de esta ciudad.
Un día en que le prestaron una caja de chicles “Adams” para que los vendiera en el centro de la ciudad, se encontró con un señor que le pidió el favor de llevar unas llaves a la avenida Cuauhtémoc No. 15, las entregara y que él lo esperaría en la tarima donde Pepe Gutiérrez hacía La Hora del Pueblo, ahí le daría su caja de chicles y unos pesos por el servicio. Rogelio no encontró la casa 15 porque el número no existía. Regresó al Jardín de los Héroes y el señor no estaba en ninguna parte. Rogelio se quedó sorprendido con unas llaves que no servían de nada y sin la caja de chicles que tuvo que pagar a quien se los había dado.
Su primer trabajo fue a temprana edad de “limpiador de hojas” en una panadería. Nos explica que mientras estudiaba, a los ocho años limpiaba las charolas de pan recién salidas del horno en la panadería de San Antón; el dueño le regalaba pan. A los diez años canasteaba en el mercado Benito Juárez. Luego fue bolero y cuidaba autos fuera del Salto de San Antón; muchas veces los sábados y domingos lavaba automóviles pues la calle era un terregal.
En su niñez le encantaba ir por la barranca, donde recolectaba las ciruelas de hueso gordo, las olorosas guayabas y el mango criollo, el cual había que cortarlo verde porque si no, se agusanaba. Uno de los niños llevaba un salero y tantito chile piquín para comérselos rico. Recuerda que la calle que bajaba de la avenida, era de pura tierra y a su lado pasaba un apantle con agua pura y cristalina, de la que todos iban a beber
Rememora que de 1958 a 1960 en que terminó la preparatoria, tenía unos magníficos maestros entre los que se encontraban: el Lic. Bernabé L. de Elias, el profesor Antonio Mora, el profesor Toño Pedroza y otros queridos docentes. Cuando terminó la preparatoria conoció a un reportero llamado Roberto y le dijo que él quería entrar a la universidad a estudiar leyes. Lo llevó con Ramón Vega Espinoza de los Monteros, miembro del sindicato quien lo contacto con Enrique González y ese mismo día le dieron el cargo de mecanógrafo, tiempo en el que el Procurador era Fructuoso F. Amaro y el gobernador Norberto López Avelar. Estuvo cuatro años en ese puesto y lo nombraron Agente del Ministerio Público durante el gobierno de don Emilio Riva Palacio Morales.
Al terminar se inscribió en la Escuela de Derecho, ahora Facultad. Nos habla de su gran amigo el licenciado Jesús Bello Espíritu, el que fue Director de la Facultad de Derecho en la Universidad y también Magistrado Presidente del Tribunal Superior de Justicia del Estado de Morelos y se refiere, con respeto de su amigo el licenciado Ramiro González Casales, quien fuera maestro de la UAEM, Juez del Tribunal de Justicia y Rector de la Universidad de Guerrero.
En el sexenio del Ingeniero Felipe Rivera Crespo, el Presidente del Tribunal Superior de Justicia del Estado, Heriberto Álvarez Tapia, nombró a Rogelio Secretario del Juzgado Penal de Cuautla, puesto en que estuvo dos años y siguió litigando en su despacho, con su compañero Jesús Pérez Güemes, hasta 1984 en que el doctor Lauro Ortega Martínez lo nombró Procurador General hasta el término de su sexenio.
Regresó a litigar en el año 1997 en que fue nombrado Magistrado Presidente del Tribunal Estatal Electoral. En aquel tiempo hubo elecciones intermedias, cuando ganó los comicios para presidente municipal, Sergio Estrada Cajigal. Al término de las elecciones, el Tribunal terminaba su función y entraba en receso. “Ahora los magistrados son nombrados por nueve años”, aclara.
En el período del gobernador Jorge Morales Barud, el Congreso del Estado lo designó Procurador General de Justicia del Estado y continuó con el gobernador Jorge García Rubí; al terminar, el licenciado Sánchez Gatica continuó litigando.
Hizo una Maestría en Investigación, Procuración y Administración de Justicia y en el año 2008 fue electo presidente municipal suplente en el trienio de Manuel Martínez Garrigos, quien lo nombró Secretario de Protección y Auxilio Ciudadano, (ahora Seguridad Pública Municipal) durante un año. El presidente Martínez Garrigos lo nombró Consejero. En noviembre de 2009, al renunciar éste, Rogelio asumió el cargo de Presidente Municipal Constitucional, hasta el treinta y uno de diciembre del 2012 y hasta la fecha, continua litigando.
En 1975 se inició como docente en la Facultad de Derecho y Ciencias Sociales, siendo nombrado Director de la misma facultad desde agosto de 1983 a agosto de 1986.
Fue Director de Servicios Jurídicos de la Universidad, siendo rector el Doctor Alejandro Montalvo Pérez.
Rogelio fue miembro fundador y presidente en dos ocasiones, de la Barra de Abogados del Estado de Morelos, A.C. Actualmente es Presidente de la Asociación de Egresados de la Facultad de Derecho y Ciencias Sociales de la Universidad Autónoma del Estado de Morelos, A.C.
Tiene su despacho de abogados en la calle Himno Nacional No. 10, esquina con la calle Francisco Leyva, colonia Miguel Hidalgo.
Su esposa se llama María Esther Pérez Mojica quien es ama de casa; procrearon dos hijos: Rogelio y Lura Leticia, ambos son licenciados en Derecho egresados de la UAEM.
Le gusta declamar y en una ocasión dentro de una audición, el gobernador Rodolfo López de Nava lo premió al ganarse un segundo lugar de todos los de sexto de primaria, declamando el Himno Nacional Mexicano y en segundo de secundaria ganó el primer lugar con la misma declamación.
Nos cuenta de sus amigos Enrique Camacho Araujo, de Adalberto Ríos Szalay, Rodolfo Becerril Straffon, Patricia Salcido Castillo, Victoria Nieto Saenz, Alfonso Roqueñí Serrano y otros más, con quienes hasta la fecha lleva muy buenas relaciones.
Hombre de prestigio, con una amplia carrera judicial, al igual que docente, exdirector de la Facultad de Derecho y Ciencias Sociales, y entregado litigante, es el licenciado Rogelio Sánchez Gatica, quien tiene casi toda la vida en viviendo en Cuernavaca. En él encontramos el ejemplo de un ciudadano digno de ser reconocido y respetado por toda la comunidad.
Semblanzas de Morelos
Rafael Benabib
rafaelbenabib@hotmail.com