El vicario general de la Diócesis de Cuernavaca, Tomás Toral Nájera, informó que ya hubo respuesta del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) tras el reciente llamado del obispo Ramón Castro Castro para agilizar los permisos de restauración de la Catedral.
Explicó que el organismo federal ya revisa los proyectos presentados, pues toda intervención en inmuebles históricos, como el complejo de la Catedral, requiere cumplir estrictamente con los protocolos establecidos.
Aclaró que no existe confrontación entre la postura del obispo y los procedimientos del INAH, sino un llamado a que la revisión avance con mayor rapidez, ya que los trabajos benefician a la comunidad y forman parte del patrimonio cultural.
“Si los proyectos no cumplen con los requerimientos del INAH, deben reformularse. Estamos afinando todo para que las obras continúen conforme a la norma”, señaló.
Toral Nájera detalló que la Catedral tiene pendientes tres intervenciones principales que son las bardas perimetrales —actualmente se trabaja en la de Hidalgo, pero falta Morelos—, la fachada de la Tercera Orden y el templo de Nuestra Señora del Carmen. Además, al interior persisten algunas grietas que, aunque no representan riesgo estructural, deben ser atendidas.
Ante los actos vandálicos que se han presentado durante marchas y manifestaciones, el vicario compartió la preocupación de la Diócesis y recordó el llamado del obispo a respetar el recinto histórico. “No se trata solo de un bien eclesiástico, sino del valor cultural y turístico del centro histórico”, enfatizó.
El vicario indicó que otros templos, como Tepalcingo y Tlacotepec, aún esperan autorizaciones, derivadas de procesos posteriores al sismo de 2017.
Por otra lado, respecto al pronunciamiento del Episcopado Mexicano sobre la seguridad en el país, el vicario señaló que se trata de un mensaje de esperanza y acompañamiento ante la violencia que afecta a la sociedad y al clero. Reconoció que los asesinatos recientes de sacerdotes en Chiapas y Guerrero reflejan riesgos derivados del acompañamiento pastoral en contextos donde se tocan intereses de grupos delictivos. Sin embargo, subrayó que la denuncia no busca confrontación, sino contribuir al diálogo y la búsqueda de soluciones por el bien del país.
