Cuernavaca.- Amar al projimo, como Dios lo estableció en sus mandamientos, pidió el obispo Ramón Castro Castro, a la feligresia.
Ayer, en la homilia dominical el obispo de la Diócesis de Cuernavaca, Ramóm Castro Castro, habló sobre el amor de Dios y el amor al prójimo, “no hay mandamiento mayor, dice el señor Jesús, amarás al señor tu Díos con todo tu corazón y al prójimo como a ti mismo, es el mayor precepto de la Ley antigua y la ley nueva, es decir, es el amor en su doble vertiente”.
Monseñor Ramón Castro dejó que en claro que el amor en la doble vertiente es lo más importante, en vertical el amor hacia Dios y, en horizontal el amor a nuestros hermanos.
Aseguró que en el mundo no existen los huerfanos, “quisiera gritar a todos que Dios es nuestro padre y no estamos solos, siempre conteremos con su amor infinito, existen muchas personas que crecen sin amor porque no conocer el amor de Cristo”.
El obispo pidió, en su mensaje dominical, amor a los demás, consideró que no es fácil, menos para aquellas personas que han causado un mal o han hecho daño, pero, dijo que el ejemplo de Dios, es el amor y hay que tenerlo siempre presente, amar al prójimo como a mi mismo, “cuando estás triste quieres que alguien te consuele, cuando estás enfermo quieres que alguien te cuide, cuando estas solo quieres compañia, pues si quieres eso da lo mismo, es es la medida de la caridad del amor”.
Consideró que en estos tiempos el amor es lo que puede salvar, el amor en medio de tiempos difíciles, por ello aseguró que el amor es la vida, es la plenitud de la existencia humana, es el testimnio de la iglesia.
Por: Marcela García marcela.garcia@diariodemorelos.com