A PARTIR del año 2022 ya será posible remover de su cargo a quien sea presidente de la República, gobernador o jefe de gobierno en la Ciudad de México, lo cual parece fácil, pero antes habrá un largo peregrinar.
Esto viene de la entrada en vigor, el reciente sábado, de la reforma constitucional en materia de revocación de mandato y consulta popular, que dependerá de los ciudadanos y no de partidos o legisladores.
Pero la cosa no viene tan fácil como parece, pues será todo un desafío de condiciones para que un presidente o gobernador que no haga la chamba a satisfacción ciudadana pueda ser quitado y quizá luego enjuiciado.
PARA QUE un presidente o gobernador sea echado de la encomienda, vía la revocación de mandato, primero hay que esperar que los legisladores elaboren las leyes secundarias en, máximo, seis meses.
Luego, esperar más: que el presidente inicie su cuarto año de mandato, o sea a finales de 2021, y juntar al menos 26.9 millones de firmas de ciudadanos de cuando menos 17 estados de todo el país.
Para gobernador, también será en su cuarto año y por ejemplo en el caso de Morelos será necesario reunir mínimo unas 435 mil firmas de ciudadanos inscritos en lista nominal del Instituto Nacional Electoral.
PROCESAR UNA revocación de mandato para presidente costaría unos 365 millones de pesos desde el INE, siempre y cuando se cumplan otras condiciones, como que vote mínimo el 40 por ciento de electores.
Más aún, en caso de que la mayoría decida remover el mandatario sea federal o estatal, todavía cabe la probabilidad de que éstos impugnen el resultado ante el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación.
Por cierto, ante todo el INE (que ojalá no esté coptado) debe aprobar si procede la solicitud ciudadana de revocación de mandato, cuya próxima chace de firmas será del 1 noviembre al 15 de diciembre de 2021.
COMO SEA la probabilidad no es rápida ni expedita, como dicen que debe ser Doña Justicia, pero como dice la sabiduría popular “peor es chile y agua lejos”. Mañana vemos lo del proceso de consulta popular.
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