En el marco de la celebración del Día Nacional del Libro en México, el estado de Morelos se distingue por contar con una amplia red de bibliotecas públicas que fomentan la cultura, la educación y el amor por la lectura. Con un total de al menos 155 espa- cios bibliotecarios, la entidad promueve activamente el acceso al conocimiento. Cuernavaca y Ayala destacan como los municipios con la mayor cantidad de recintos bibliotecarios, con 14 cada uno, de acuerdo con datos del Sistema de Información Cultural del gobierno federal.
Los municipios de Cuernavaca y Ayala lideran en número de espacios bibliotecarios. Otros municipios como Coatetelco, Xoxocotla, Atlatlahucan, Tlalnepantla, Tlayacapan y Hueyapan cuentan con una biblioteca pública cada uno.
La mayoría de las bibliotecas públicas de Morelos ofrecen un horario de atención general de 10:00 a 16:00 horas, en el cual los visitantes pueden acceder a una amplia gama de actividades y servicios. Los usuarios pueden consultar material bibliográfico, realizar inves- tigaciones, leer en las instala- ciones, utilizar computadoras para trabajos académicos, solicitar reproducciones de documentos y tramitar un carné que les permita acceder al préstamo de libros. Estos servicios están diseñados para adaptarse a las necesidades de estudiantes, investigadores, docentes y del público en general.
Además de las bibliotecas bajo la administración del gobierno, el estado cuenta con instituciones que amplían la oferta bibliotecaria, como las bibliotecas centrales de la Universidad Autónoma del Estado de Morelos (UAEM).
SE MODERNIZAN
Con la llegada de las tecnologías de la información y comunicación, muchas de las bibliotecas en Morelos han optado por modernizar sus servicios, integrando recursos digitales que faciliten el acceso a la información. En la actualidad, la mayoría de estos espacios cuentan con computadoras para la consulta en línea, y en algunos casos, como la bibliotecagalería Miguel Salinas de la UAEM, se ofrece un catálogo digital que permite consultar el acervo. Esto ha facilitado que los usuarios accedan de manera rápida y cómoda a una variedad de textos sin necesidad de contar con los libros en formato físico.
La biblioteca Miguel Salinas, ubicada en el centro de Cuernavaca, es un ejemplo destacado de este modelo híbrido: Además de contar con libros impresos, este espacio ofrece una galería de arte y permite a los usuarios explorar digitalmente gran parte del acervo de la universidad.