Salvo los grupos de servicio social conocidos como Rotarios y Club de Leones, no preciso otros que tengan la longevidad que ha alcanzado el Grupo Morelos Cuauhnáhuac, cuyos fundadores dados a conocer en mi entrega del día de ayer, tuvieron la fortuna, resistencia y vieron la gran oportunidad para que en el curso de los años nos pudiésemos agregar muchos más que desfilamos en esta organización que en 35 años, sólo ha tenido tres presidentes, el gran ingeniero Jesús Orozco Valle, quien tuvo su negocio de gran prestigio y servicio para todo lo relacionado con los materiales gráficos para la arquitectura; Florencio Roldán Fuentes, eminente directivo bancario y desde hace 7 años tras la partida de Florencio, César Salgado Castañeda… El pasado último sábado del mes de julio, la convivencia fue grata por todos quienes asistimos para celebrar el trigésimo quinto aniversario del Grupo con el cual, se han hecho solidarios el Consejo Cívico Ciudadano que preside este escribano, Pablo Rubén Villalobos, y recientemente el Grupo Identidad Morelos, a cargo de Manuel Torres Incháurregui… En el marco de esta celebración treinta y cinco añera se cumplió con una gran y grata bohemia, en la cual participaron voluntariamente para demostrar sus dotes y dones en cuestiones de la cantada, el baile, la bailada y la declamación varios de los integrantes de estas organizaciones… Bajo la conducción parcial de César Salgado, fui encargado para dar la bienvenida a todos los asistentes; en esta ocasión no convocamos ni tuvimos a ningún acompañante del sector público y fue por ello entre otras cuestiones que sólo expresé el saludo, la bienvenida y de inmediato convoqué a la gran asistencia para que todas ellas y ellos cantáramos las tradicionales Mañanitas a efecto de iniciar el festejo cumpleañero de ¡Nuestro Grupo Morelos Cuauhnáhuac…! En turno, María Antonieta Hernández Llergo leyó el documento que con valiosa información del ingeniero César Villegas Rivero, ella complementó para explicar el Significado de Bohemia y expresó: “Hace más de mil años, nómadas de la India llegaron a la Región de Bohemia en Europa; este pueblo llamado Romaní o Gitano se caracterizaba por su gran espíritu artístico… La gente de los alrededores los llamaba también Bohemios… Estás veladas de fiesta, arte y esparcimiento espiritual se extendieron por varios continentes llegando a América a través de los holandeses y los portugueses… De esta manera, varias culturas se fusionaron reuniéndose para realizar alegres festividades con música, cantos, bailes y ritmos… Es así como han perdurado nuestras conocidas ‘Bohemias’, que son reuniones de esparcimiento donde cada participante manifiesta sus diferentes dotes artísticos dónde reina la alegría, el amor al arte y la unión espiritual”… ¡Qué buen explicativo…! Se vinieron en cascada las participaciones de “los artistas” apoyados por los micrófonos y sonido del amable Marco Antonio Albarrán, quien en forma extraordinaria interpretó bellas melodías como “El Triste” y otras, a cual más magníficas por su voz y actuación... Algunos de los cantantes fueron apoyados por el dueto de ‘compas’ que laboran en el Centro de Cuernavaca, invitados por Mario Lavín, quien también aportó una segunda dotación del elixir mágico tequilero, luego de que Emmanuel León y Vélez nos convidara la primera por lo cual, el ambiente se puso bueno, tan bueno que Ramón Morán nos regaló como postre su ríquísima nieve y dos dotaciones más para que ‘amarrara’ bien la fiesta… Todos estábamos contentos por escuchar la cantada y los ‘górgoros’ de quienes participaban… Ahí se significó la grata presencia del buen cantante que lo es Andrés Monge Zárate, hijo del distinguido integrante de nuestro Grupo Eloy Monge Montiel, quien nos entregó bellas interpretaciones como: “A mi Manera” y otras más, ¡qué voz…! Vinieron más cantores en secuencia como las dos interpretaciones de su tierra de origen que nos regaló la bella rusa integrante del Grupo y del Consejo, Svetlana Tkachenko acompañada por su bien tocado acordeón, ¡qué momento…! Luego de ella descollaron Marco Antonio Muñoz, qué voz; Antonio Miranda, de lujo; y para mí fue sorpresa la cantada de Ramón Morán junto con Marcos Hernández, Rogelio Silva y Alejandro Diez, qué trio de tres por separado cada uno… Hubo declamaciones y baile, de ello hablaremos mañana… Continuará. ¡Hasta mañana que será un día más!
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