CUERNAVACA, MORELOS.- Audiencias diferidas o retrasadas sin razón alguna son las observaciones que han detectado en los recintos del Poder Judicial, afirmó la magistrada presidenta del Tribunal Superior de Justicia (TSJ), María del Carmen Verónica Cuevas López.
Lo anterior, derivado de inconformidades de las personas que acuden a diario a las salas de juicios, o incluso de los mismos abogados, por ello a partir de este mes se implementó una serie de recorridos a fin de ubicar estas situaciones y lograr dar un mejor servicio para la ciudadanía.
"Nosotros ahorita lo que estamos haciendo es tener visitas constantes, a partir de agosto se implementó ya en cada recinto del Poder Judicial que los jueces estén ahí verificando que las audiencias se lleven a las 08:30, que las audiencias no se difieran porque era una constante que nada más se levantaban razones", explicó.
Aseveró que esta manera de trabajar tiene la finalidad de que los procedimientos sean rápidos y que se cumplan con los objetivos, descartando la existencia de una cacería de brujas, o políticas de terror, al insistir que tiene que ver con el orden y la disciplina de quienes forman parte de dicha institución.
Insistió en que era reiterado que las audiencias se retrasaran, o que a los litigantes les dieran plazos excesivos, por ello con este tipo de visitas se le está haciendo ver al personal cuál es su función y el compromiso de la institución.
"El objetivo que se busca es que efectivamente se cumpla con los acuerdos, se notifique, que tengan un seguimiento, que las sentencias sean emitidas oportunamente", mencionó al externar que ahora en Cuernavaca habrá una disminución en la carga laboral tras la apertura del departamento de Orientación Familiar en Cuautla.
Razón que nosotros vemos que el actuario no han notificado, razón porque se levantan las actas correspondientes y el objetivo es que los procedimientos sean ágiles, que los procedimientos cumplan con su cometido y que no se tarden años, no es ninguna cacería de brujas." Verónica Cuevas López, presidenta del TSJ.
Por: Omar Romero
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