CUERNAVACA, MORELOS.- De a poco, el inmueble privado en la esquina de Plan de Ayala y Juan Dubernard, en la colonia Teopanzolco, se transformó en una improvisada "Ciudad de Gobierno" en Cuernavaca, que ha tenido un impacto principalmente negativo entre los vecinos.
El aumento de población flotante, entre trabajadores y ciudadanos que todos los días acude a realizar trámites, ha acarreado consigo un incremento del tráfico vehicular en la demarcación, comercio ambulante, problemas de estacionamiento e inseguridad.
Para atajar la problemática, la representación vecinal ha hecho varias gestiones ante las autoridades municipales y estatales.
Desde hace un año se organizaron en Comités de Vigilancia Vecinal (Comvives), inhiben la proliferación de vendedores ambulantes, aunque hay algunos intocables porque están protegidos por el Nuevo Grupo Sindical (NGS), y tratan de evitar que sus calles se conviertan en un verdadero estacionamiento público, pero no lo consiguen.
En las calles Gobernador de Morelos (antigua vía del ferrocarril), Piru, Fresno, Pino, Miguel Alemán, Ciprés y Olivo, vecinos y visitantes libran todos los días una batalla; unos por evitarlo y otros por conseguir un espacio para dejar el carro.
Aunque la plaza cuenta con un estacionamiento, es de paga y la hora cuesta 20 pesos; a parte de éste, ninguna de las dependencias que se reubicaron en los últimos ocho años en el mismo lugar ofrece estacionamiento a los usuarios de sus servicios.
La primera en mudarse fue la delegación de la Secretaría del Trabajo; la última fue la delegación del IMSS.
También se encuentran ahí el Infonavit, el INE, Fovissste, Relaciones Exteriores, INEGI, Conciliación y Arbitraje, el Cobaem, la Sedeso y el Fondo Morelos, entre otras.
Los vecinos dicen que aumentó el robo de vehículos y cristalazos, pero la mayoría de los visitantes prefieren correr el riesgo, a pagar la alta cuota del estacionamiento; también se arriesgan a ser infraccionados, sobre todo en la calle de la vía, donde la Policía de Tránsito hace al menos un recorrido al día.
La "Ciudad de Gobierno" también llevó la oportunidad de negocio; algunos abrieron sus portones para vender comida, instalar un cyber o una fotocopiadora, o rentar improvisados locales a gestores de trámites.
Pero en la balanza, han sido más los problemas que los beneficios, con el creciente número de personas en tránsito, a muchas de las cuales, incluso, se las reporta como sospechosas, cuando pasan más del tiempo del razonado en el área, dice el propietario de una papelería que ha visto la transformación de la actividad diaria y coincide en que el estacionamiento en la vía pública es el conflicto más visible.
"Este, ese y aquel, son autos de trabajadores, que los dejan aquí desde las siete de la mañana y cuando tú quieres poner tu vehículo, no puedes porque no hay donde", se queja y con ello justifica las decenas de botes que los vecinos colocan todos los días frente a sus casas para evitar que alguien ajeno use la calle para estacionar su auto.
En un recorrido virtual, encontramos que sólo Nuevo León y Zacatecas cuentan con complejos arquitectónicos construidos ex profeso para aglutinar oficinas públicas, en ambos casos, de servicios estatales.
Reclamo. Vecinos de la colonia Teopanzolco se quejan del tráfico vehicular, la falta de espacios para estacionarse, los "cristalazos" y robos, así como el comercio ambulante que ha traído consigo una plaza usada como una improvisada "Ciudad Gobierno".
Este, ese y aquel, son autos de trabajadores, que los dejan aquí desde las siete de la mañana y cuando tú quieres poner tu vehículo, no puedes porque no hay donde." Vecino de la zona.
La batalla
Las calles Gobernador de Morelos, Piru, Fresno, Pino, Miguel Alemán, Ciprés y Olivo, son constantemente peleadas para estacionar autos de visitantes, vecinos y clientes.
10 horas
permanecen estacionados los autos de los empleados en la zona.
Por: ANTONIETA SÁNCHEZ
antonieta.sanchez@diariodemorelos.com