Para mi gusto un poco tarde se emitió un decreto en el que suspende “temporalmente” las actividades de balnearios, centros de culto, bares, discotecas, centros nocturnos, gimnasios, centros deportivos, boliches, teatros, salones y jardines de eventos sociales “con el objetivo de paliar el contagio del coronavirus SARS-CoV-2 que provoca el Covid-19”, el problema es que en el norte de la ciudad nadie les hace caso.

El acuerdo fue publicado en el Periódico Oficial “Tierra y Libertad” y ahí se establecen “las medidas preventivas necesarias que se deberán implementar” en la entidad, “a fin de mitigar y controlar los riesgos para la salud que implica la pandemia por coronavirus o Covid-19”.

Lo que es un acuerdo similar al aprobado por el Ayuntamiento de Cuernavaca, pero que es como las llamadas a misa, nadie le hace caso; pues, como hemos podido constatar, los bares siguen abiertos y funcionando no sólo por unas horas, sino por toda la noche. ¿Y por qué pueden hacerlo?, simplemente porque no hay quien los ponga en orden.
El problema es que estos centros las personas no sólo se amontonan y bebiendo pierden toda proporción de guardar distancia, sino -por lo contrario- se abrazan y hacen “otras cosas”, lo que trae como nos podemos imaginar un contagio más grave entre la gente, extendiendo la pandemia.

A ver si ahora, con la instrucción estatal, realmente se pone orden, los ciudadanos estamos en riesgo sólo por unos cuantos que quieren hacer más dinero y no les importan los demás, y que desde luego tienen concesiones de acuerdo con las “mordidas”.
La nota nos explica que, en el artículo segundo, el acuerdo señala que se debe “evitar la asistencia a centros de trabajo, espacios públicos y otros lugares concurridos a los adultos mayores de 60 años o más y grupos de personas con riesgo de desarrollar enfermedad grave y/o morir a causa de ellas”. También se incluye a mujeres embarazadas o en lactancia, menores de cinco años y discapacitados entre otras.
Señala además que se suspenden las actividades escolares en todos los niveles hasta el 17 de abril, “las actividades de los sectores público, social y privado en Morelos que involucren concentración física, tránsito o desplazamiento de personas a partir de la entrada en vigor de este Acuerdo y hasta el 19 de abril del 2020”. Los gobiernos deberán, dice, “instrumentar planes que garanticen la continuidad de operaciones para el cumplimiento de sus funciones esenciales”.

En cuanto al sector privado, “sólo continuarán laborando las empresas, negocios, establecimientos mercantiles y todos aquellos que resulten necesarios para hacer frente a la contingencia”; es decir, hospitales, clínicas, farmacias, laboratorios, servicios médicos, financieros, telecomunicaciones y medios de información.
También podrán seguir laborando hoteles, restaurantes, gasolineras, mercados, supermercados, misceláneas, transporte, distribución de gas, “siempre y cuando no correspondan a espacios cerrados con aglomeraciones, debiendo limitar su capacidad de aforo y respetando la Jornada Nacional y Estatal de Sana Distancia (1.5 metros) entre una persona y otra a cada lado”.
Pero sí “se suspenden temporalmente las actividades de todo tipo en lugares de concentración de personas, como centros de culto, bares, discotecas, centros nocturnos, gimnasios, centros deportivos, balnearios, boliches, teatros, salones y jardines de eventos sociales, entre otros, que no sean necesarios para hacer frente a la contingencia”. Se suspenden también los eventos masivos, las reuniones y congregaciones de personas.

El acuerdo entró en vigor a partir de este sábado 28 de marzo de 2020. Esperemos que lo respeten, porque lo cierto es que no hay manera de que muchos de los involucrados tengan conciencia.
Es tiempo de estar en casa y dejar todo a un lado, la situación no es sencilla; y si la ciudadanía no cumple, será necesario que la autoridad haga lo que en España e Italia y detenga y multe a todos aquellos que salgan de su casa irresponsablemente. Es importante señalar que hay un grupo, los que tienen trabajos en la calle sin remuneración con una empresa o persona, que se quedarán sin tener con qué comer y ahí también tiene que intervenir el gobierno. Hay mucha gente que si no trabaja no come y necesita de un verdadero apoyo.

Ya nos señalaron cómo la Secretaria del Trabajo local ayudará a las empresas y empresarios, pero no nos han dicho quién va a sacar adelante a esta gente que vive al día con la venta de productos que, desde luego, pueden estar llenos de virus de la pandemia. Alguien tiene que hacer algo, porque si no el aumento de la enfermedad será de manera exponencial. ¿No cree usted?

Por: Teodoro Lavín León / lavinleon@gmail.com / Twitter: @teolavin

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