Sin lugar a dudas, las primeras semanas de un nuevo gobierno son como miel sobre hojuelas, pues se despliega una serie de nuevos programas y proyectos que, supuestamente, se llevarán en los próximos seis años.

Platicábamos el pasado miércoles de la asamblea de Morena, que a pesar de que estuvo movidita no aclaró muchas cosas; al parecer, el cambio de dirigencia será el mes entrante, pero ahora hay declaraciones del líder actual acerca de que sólo cambiaran las carteras vacías.

Carmelo Enríquez señaló que la convocatoria para la reestructuración de la dirigencia aún no está clara, ya que, aunque se menciona la necesidad de elecciones, circulan rumores sobre la permanencia del actual líder y exigió que haya claridad sobre la situación, señalando que la indefinición actual impide una toma de decisiones informada. Y desde luego que tiene razón, ya que sin una dirección clara “no podemos seguir en este estado de incertidumbre. Es vital que se defina si habrá o no elecciones, para que todos los aspirantes y la base militante puedan actuar en consecuencia”; si no lo aclaran, puede crearse una mayor división de la que ya existe.

Por lo pronto, los aspirantes, tanto Carmelo como Tadeo, ya están trabajando, pero se dice que sólo podrá ser el que ya sea miembro del consejo político, pero en realidad hay muchos rumores y declaraciones que creo les hacen más daño que bien.

Por otro lado, el tribunal del estado sigue hecho un caos y el presidente se ha convertido en una incógnita, pues todos los días hace hasta lo imposible con tal de que no lo quiten de su cargo, nos informan que hoy tendrían los disidentes cita con la gobernadora, esperemos pueda poner orden de manera tajante, sólo se siguen acrecentando los problemas del poder judicial que, además, tiene encima la reforma que el gobierno de la 4T se ha empeñado en llevar a cabo con su aplanadora que forman las mayorías que el INE le dio en las cámaras arbitrariamente porque no van de acuerdo con el porcentaje de votos que obtuvo en las urnas. En fin, una serie de hechos de una aplanadora nunca vista ni en el priismo en sus buenos tiempos.

Empiezan los rumores de un golpeteo interno entre los nuevos designados funcionarios estatales, los grupos se pelean los espacios, y los que al parecer son los responsables ante la gobernadora nombran a su gente en diferentes cargos, aunque no cumplan con el perfil; en verdad, hay algunos que dan vergüenza, como las ex diputadas que lo hicieron de manera realmente pésima durante su encargo en el legislativo.

En el Poder Legislativo, por cierto, las cosas están a medias, no se definen todas las comisiones y, a pesar de que son 12 los morenistas y sus aliados, las divisiones internas le están permitiendo a la minoría de la oposición ser quienes definan las cosas. No cabe duda de que la práctica hace al maestro y que los diputados noveles no encuentran su lugar ni sus funciones. Habrá que estar pendientes, porque es otro poder que ha tenido un desprestigio creciente en los últimos trienios. ¿No cree usted?

Las opiniones vertidas en este espacio son exclusiva responsabilidad del autor y no representan, necesariamente, la política editorial de Grupo Diario de Morelos.

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