El 2 de agosto pasado, el presidente Andrés Manuel López Obrador  anunció la implementación de una campaña que se llama “Estrategia Nacional contra las Adicciones”. Esta  se trata de informar a través de los medios de comunicación, a través de la radio, los periódicos y la televisión, el mal que las adicciones traen al ser humano y especialmente a los jóvenes.
Se está planeando todo un esquema nacional para que esta estrategia separe a los jóvenes de las drogas, que, aunque todavía no se presenta el proyecto completo, el presidente Andrés Manuel López Obrador, planteó en una de sus ruedas de prensa (mañaneras), parte del plan para evitar las adicciones desde su origen y prevenir el uso de cualquier droga que afectan a la niñes y jóvenes mexicanos.
 Comenzando por las campañas que ya se están llevando a cabo, como la de “jóvenes construyendo el futuro”, las becas a los estudiantes hasta finalizar los estudios superiores y el sueldo a los jóvenes que entren a trabajar en algún negocio, fábrica o taller o en el lugar donde los acepten, recibirán un pago de 3 mil 600 pesos al mes, para alejarlos de la tentación de las drogas o caer en la trampa de una vida fácil dentro del mundo de los estupefacientes.
Este proyecto, que se estará volviendo realidad, ya que comenzará desde esta próxima semana, se trata de una campaña total, en la que estarán involucrados todos los ciudadanos, desde los estudiantes de las escuelas primarias, la preparación de los maestros para que les expliquen a los alumnos cuáles son los peligros que corren si se meten en ese mundo de las adicciones.
Al mismo tiempo preparar a los padres, por medio de información dentro de las Sociedades de Padres de Familia, el respaldo de hojas informativas para que los papás se lleven a sus casas y pongan en práctica esa información. Se incluirá la propaganda al respecto a través del tiempo que tiene el gobierno dentro de medios televisivos, de la prensa escrita, aunque se trate de que las autoridades tengan que pagar por esa publicidad.
Con la cooperación de las redes sociales y de la información continua en el hogar, en conferencias, en panfletos distribuidos a los automovilistas, hacia los taxis, en oficinas, en comercios y con la ayuda de la sociedad en general, se podrá convencer a la gente de todas las edades, que es muy importante prevenir esas adicciones.
En cuanto a quienes ya cayeron en el uso de enervantes, se van a ampliar las clínicas y los hospitales para tener a grupos médicos especializados en la cura y rehabilitación de quienes ya son adictos. Se ampliaran el Instituto del Seguro Social (IMSS) y al Instituto en cuanto a doctores y doctoras en sicología y en siquiatría, médicos generales, medicamentos y los aparatos que se requieran.
Hugo Gómez Gatell, encargado de este programa, resaltó que México pasó de ser un País de tránsito de drogas a ser un país de consumo de estupefacientes, por lo que la campaña contra las adicciones es de trascendencia Mayúscula, por la repercusión que tiene este fenómeno en la salud pública.
Una de las decisiones centrales de la Cuarta Transformación, es dar un giro de 180 grados a la idea que se tiene de la prevención de las adicciones, pues todos estos años se ha luchado a través de la prohibición represiva a cargo de las fuerzas de seguridad de la Sedena y de los cuerpos policiacos.
Se aborda este tema de las adicciones como un problema de salud pública, a partir de la conversación sobre la situación emocional de las personas ya involucradas. El nuevo concepto es dialogar, escuchar y sanar a las personas.
La actividad ve más allá que mostrar testimonios de jóvenes afectados por las consecuencias de consumir drogas, sino que la campaña es una convocatoria social y va más allá que un mensaje de campaña publicitaria.
La cultura de la paz es una responsabilidad de toda la sociedad de manera colectiva. Se trata de construir puentes y general posibilidades de ayuda mutua, cuando alguien se sienta solo, tenga problemas con la familia, en la escuela o en su comunidad y que encuentre el soporte institucional para hacerlo y también la mano amiga, la fraterna del hermano, del compañero de su salón de clases, del padre y sobre todo del maestro de su escuela.
Se trata de formar una capacidad de diálogo y no seguir destruyéndose a sí mismos en una guerra inútil contra las drogas, que no sirve para evitar adicciones sino para incentivarlas. Otra manera de respaldar ese proyecto, es mandando a nuestra juventud a hacer deporte, el que hace que las adiciones se retiren de sus inquietudes.
Las drogas no son para nuestros jóvenes. Están solicitadas por los Estados Unidos, cuyo pueblo es el más afectado y quien tiene que defenderse dentro de sus fronteras, pues ellos reciben la droga, la pagan y la consumen, sin que se sepa que hayan detenido a ningún cártel estadunidense. O a los mismos estadunidenses que les venden la droga.
Los vecinos no quieren más migrantes y nos han obligado, mediante la amenaza del alza de los aranceles, a retenerlos y a veces a deportarlos a sus países de origen. Sería bueno que el gobierno de México les cobrara aranceles a todas las armas que les venden a la delincuencia organizada, quienes las compran por miles de millones de dólares. A ver si no ponen el grito en el cielo.
Mucho nos ayudaría a que ellos hicieran una campaña contra las adicciones dentro de su territorio o por lo menos que varios estados de la Unión, los cuales no sólo son grandes consumidores, sino que ya se han vuelto productores de enervantes, mismos que a menudo son adquiridos por los propios mexicanos que viven en este lado de la frontera, ya que aquí sí es delito su siembra y consumo (aunque el expresidente de México, Vicente Fox diga continuamente por televisión que la mariguana no hace daño, que se consume en casi todo el mundo y que sería un buen negocio para México ¿O para él?)
Una propuesta deseable es el trato a los miembros de la Guardia Nacional. Creo que lo más aconsejable es saludarlos con cortesía pues ya dejaron de ser los soldados y marinos intocables, que sólo respetaban las órdenes de sus jefes. Ahora ya es gente nuestra y si les enseñamos un poco de cariño y respeto, tendremos lo mismo de respuesta. Son los mismo que somos nosotros, también están descontrolados, pues nunca se acercaron tanto a la población civil como ahora. Vamos a mostrarles nuestro agradecimiento y hacerles ver que cuentan con nuestro respeto y cariño y así ellos se verán obligados a querernos y cuidarnos como nuestra familia.
En fin que la Estrategia contra las adicciones que el gobierno de México está impulsando es uno de los proyectos más importantes y de la necesidad de echar a andar de inmediato, pues estamos seguros que esta va a ser la más importante OBRA DEL SEXENIO.

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