Ya criticaremos después
En estos momentos de peligro para toda la ciudadanía por el virus COVID-19 en el que todo México debería estar respaldando al presidente López Obrador y al vocero de la Secretaría de Salud, Héctor López-Gatell, quien es el que tiene el conocimiento de lo que está pasando con el coronavirus dentro del País y del mundo entero, todavía se encuentran enemigos en los periódicos y en algunas cadenas televisivas insultando a los que están trabajando para que el resto del pueblo de México continúe viviendo. O este sujeto ya olvidado por un programa que ya nadie ve, tiene otro especialista que pueda explicar tan bien como el doctor López-Gatell lo que sucede.
Si México estuviera bajo la férula del PRI o del PAN, esos críticos ya estarían muertos o en la cárcel. Aunque dicen que la libertad de expresión debe de ser respetada, de acuerdo, pero nunca a costa de la salud del ser humano como en estos momentos de urgencia nacional con la amenaza del COVID-19 cuando se ataca pidiéndole a la población que no hagan caso de lo que dice el Doctor Héctor López-Gatell quien busca el que ese virus mate lo menos posible a los ciudadanos.
Esta es peor que una guerra mundial, porque solo existe un contendiente y ese es el virus, y por el momento no hay defensa contra eso por más investigación que se intente alrededor del mundo, aunque estamos esperando que pronto la descubran.
Existe una teoría de que una nueva tecnología llamada G5 pueda tener injerencia en la comunicación o control del coronavirus, manejada por corporaciones del exterior. Una de las preguntas que se hacen es:
¿Por qué no sabemos nada de los lugares donde la pandemia del COVID-19 sólo pasó por WUHAM? Pues en la misma China sólo se supo de la ciudad donde empezó, mientras que ninguna de las ciudades o pueblos que la rodean fueron infectados? Igual pasó en la India, en Corea del Sur y en varios países más. ¿Por qué atacó a Nueva York en el Este, al estado de Washington que está en el Oeste y a los estados clave de Estados Unidos, afectando a miles de neoyorquinos? Luego por el Oeste al Estado de California y a la Florida por el Este. ¿Será que la nueva tecnología del G5 a través de los celulares chinos tenga algo que ver? ¿Por qué no ha inundado a África? Pero en fin quizás esto sea una noticia falsa.
Lo que es cierto es que un periodista se trae un pleito que quiere hacer personal contra el Ejecutivo. Que lo critique, pero que nos deje en paz a los que estamos corriendo un peligro de muerte. Y al otro comentarista, que no periodista, cuyo patrón es el dueño de la televisora TV Azteca y de quien recibió las órdenes para atacar al presidente, ni quien lo pele.
Bastantes problemas tenemos los mexicanos con el asunto de la pandemia, al distanciamiento social, el no salir de casa, el haber parado la economía al cerrar centros de trabajos donde están habiendo miles de desempleados, de vendedores ambulantes, del turismo, etcétera, para que unos tres comunicadores (con una escuálida sin chamba), ataquen y desinformen a sus lectores y televidentes continuamente y de mala leche a quienes están tratando de evitar un mayor daño a la ciudadanía.
Se olvidan que ellos también son padres e hijos y que están rodeados por familiares quienes no están exentos de acompañarnos en esta terrible experiencia, que gracias a sus críticas demoledoras, al no seguir con las indicaciones de los especialistas se vuelva mortal.
Varios de los empresarios mexicanos han respaldado la petición del presidente Andrés Manuel López Obrador en dejar a sus trabajadores irse a su casa sin dejarles de pagar su sueldo, los que han respondido positivamente.
El Presidente Andrés Manuel López Obrador acaba de recibir una carta de la asociación de empresarios estadunidenses y algunos mexicanos, de que ellos no pueden dejar de trabajar ya que son exportadores e importadores internacionalmente muy importantes para México y Estados Unidos, como una fábrica de pasta de dientes, otra de mermeladas, mayonesa y mostaza, una más de yinss (o como se escriba) y de ropa de una tal Sara, quienes no sólo se pasan toda la mercancía hecha en Taiwán de contrabando sino que ni impuestos paga, las computadoras manzana y así otras firmas más, las que amenazan con irse si se les obliga a cerrar unos días más. Nos preguntamos adonde irán. Porque como dice el presidente López Obrador: ellos ya no son como antes los dueños de México.
Rafael Benabib