Un joven de 19 años de nombre Daniel Santulli, quedó ciego, paralítico y con problemas de habla después de haber bebido un litro de vodka al participar en un ritual de iniciación o novatada en la fiesta de la hermandad Phi Gamma Delta de la Universidad de Missouri.
Su abogado consideró esta acción, como una de las peores novatadas de la historia ya que el joven necesitará atención médica de por vida tras sufrir una lesión cerebral grave en octubre de 2021, cuando ocurrieron los hechos.
De acuerdo con medios como ABC, todo ocurrió la noche del 19 de octubre de 2021, durante un ritual. Ahí, integrantes de la hermandad le pusieron Santulli un tubo en la boca y lo obligaron a beber una botella de vodka y además cerveza.
Missouri frat brothers charged in horrific hazing of student Daniel Santulli
Absolutely horrible what they did to Daniel https://t.co/DwZqls9c9z via @nypost pic.twitter.com/0KwHCzZpjr
— NoWonderland True Crime (@NoWonderland__) June 21, 2022
Esta acción provocó un paro al joven, a lo que la única inexperta reacción fue llevarlo a la puerta del Hospital Universitario y dejarlo ahí inconsciente. Afortunadamente los médicos le salvaron la vida, pero tuvo consecuencias graves, de acuerdo con el relato de la familia que forma parte de una demanda contra sus compañeros universitarios.
El diagnóstico en el hospital fue “un daño cerebral masivo”, condición que actualmente lo mantiene pegado a una silla de ruedas y sin poder hablar. Por esta razón, 22 personas de la fraternidad han sido demandadas por los hechos aunque aún no hay culpables. Aun así la Universidad de Missouri prohibió la entrada al campus a los señalados por las graves faltas cometidas contra el alumno.
Ya hay alumnos señalados
Recientemente se ha dado a conocer que Samuel Gandhi y Alec Wetzler han sido señalados como presuntos responsables de obligar al alumno a beber el vodka. Wetzler habría organizado la reunión donde Santulli fue obligado a beber cantidades excesivas de alcohol.
Gandhi fue demandado porque la noche del incidente regresó a la habitación de Santulli y no hizo nada para ayudarlo, pese a que el joven yacía tirado, desmayado, y sin haberse movido.